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Veterano Nivel 3

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El/Ella - tan necesari@ como respirar.
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El dinero no trae la felicidad, - pero cuando el primero se va, la segunda le sigue
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El tiempo es el mejor maestro, - desgraciadamente mata a todos sus estudiantes
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Oliver y Benji - ¡Se han vuelto reales!
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Guarda tu ira, - si dejas que te controle solo conseguiras parecerte a las personas que te enfurecieron

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Ten cuidado, - Milhouse lleva su traje de camuflaje...
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Podreis quitarme - todo lo que querais, pero nunca me quitareis mi imaginación
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Por que sin duda alguna - Esta es mi bandera
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..En un Beso - Sabras todo lo que e callado..
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MENTE SUCIA - tu tambien la tienes

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Tus ojos - puedes maquillarlos, frotarlos,
abrirlos, cerrarlos,
tatuarlos,
pero nunca dejarán de reflejar
lo que en tu alma se esconde.
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Globos - y su nueva utilidad
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¿Por qué caminar - cuando puedes volar?
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Everything Is Important! -
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Si decis que sois diferentes, - ¿por qué cuando un cartel consigue muchos votos haceis la mayoria de
los carteles del mismo tipo?

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Pregunta de Trivial - - Fiolosofia  , buaah , que faciiiiil
¿ Cual es el principio de Arquimedes ?
+ Pues la A
puntos 7 | votos: 9
Porque a todos - nos da corte que se pongan a mirar las fotos de cuando eramos pequeños
puntos 5 | votos: 5
Los grandes proyectos - siempre empiezan con grandes acciones, no te rindas nunca
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Esta - es tu cara cuando no entinedes alguna palabra
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shakira, - una mujer de pelo en pecho

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Porfa - Rascame la barriga
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CAMUFLAJE - NIVEL: DIOS
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Al otro lado de la vida 1x70 - Una calle cualquiera, Sheol
7 de septiembre de 2008

Rafael y Morgan se guiaron por los graves aullidos que venían del
otro lado de la manzana para saber cual sería su siguiente objetivo.
Viajaban a pie haciendo una ronda por las calles vacías y ya
descuidadas y sucias a esas alturas. Los barrenderos habían dejado
de hacer su trabajo por miedo a resultar atacados el mismo día que
la infección había llegado a la ciudad. El resto de cuerpos del
estado estaban demasiado ocupados tratando de evitar lo que ya
parecía algo irremediable como para preocuparse por esas nimiedades.
En consecuencia, las calles estaban llenas de periódicos que jamás
llegarían a ser leídos, bolsas de basura rotas y despanzurradas por
el suelo que se amontonaba en las aceras, curiosamente bajo los
balcones y las ventanas de los bloques de pisos y todo tipo de
desperdicios que se iban acumulando por doquier. Los bloques estaban
llenos de gente asustada que no se atrevía a salir, de modo que los
no muertos habían heredado las calles; habían heredado la ciudad, y
no tardarían mucho en apoderarse del mundo.
	Cuatro días antes habían dado una pequeña tregua, pues no
resultó muy difícil reducir a los infectados que había por las
calles dado su reducido número. Pero cuando los heridos se pasaron
al otro lado, trayéndose consigo un ejército cada vez mayor, la
situación se descontroló por completo. Las noticias no hacían más
que dar datos de nuevos focos de infección; la mayoría de ellos se
encontraban en un círculo cada vez mayor con el centro en el extremo
oriental de Sheol, donde la ciudad lindaba con el bosque de Pardez.
Sin embargo, se estaban dando nuevos brotes en distintas zonas del
país, muy distantes a Sheol, incluso más allá de las fronteras y
en otros continentes. A todas luces ese problema parecía querer
abarcarlo todo, y la mayoría de quienes trataban de evitarlo
acababan formando parte de él.
	Eran las seis de la tarde, una calurosa tarde más, donde no corría
ni una gota de viento. El sudor les corría por la frente y las
mejillas, transformado en centenares de perlitas que conseguían
refrescarles un poco a medida que avanzaban. Al girar la esquina
vieron a uno de ellos zarandeando un coche rojo, demasiado absorto en
sus quehaceres como para prestarles atención. Pistola en mano se
acercaron, siempre a una distancia prudencial, y repitieron el mismo
ritual que llevaban haciendo tanto tiempo que ya ni recordaban como
era el trabajo previo a la catástrofe. En esta ocasión fue Rafael
quien puso en marcha el primer paso del protocolo: abrir una vía de
comunicación.
	Se presentó ante el cadáver viviente y le exigió que se diera
media vuelta y pusiera las manos en alto. Se sentía estúpido
haciéndolo, pues sabía que sus palabras resonarían fútiles en su
cabeza como lo haría el ladrido de un perro en la suya, pero no
podían correr el riesgo de llevarse por delante a ningún civil
sano. El hombre, vestido tan solo con unos tejanos y una camiseta
desgarrada, se giró un momento, dejando el coche en paz, y dio un
corto bufido al verles. Ni respondió ni levantó las manos, lo que
les daba vía libre para llevar a cabo el segundo y último paso del
protocolo: la eliminación del sujeto.
	Se acercaron unos pasos más al hombre, que seguía golpeando el
costado del coche, como tratando de abrirlo pero sin saber cómo, y
entonces se puso nervioso. Dio media vuelta, y les miró a uno y a
otro alternativamente. Ambos le estaban apuntando con la pistola,
hacía ya un rato que habían quitado el seguro. Empezó a moverse de
un lado a otro, sin mover los pies del suelo, como si estuviese
protagonizando una danza macabra con una música que solo él oía.
Entonces dio un paso al frente, y profirió un grito de advertencia,
al tiempo que subía un brazo y daba un segundo paso, cogiendo
inercia para salir corriendo hacia ellos.
	Tan solo consiguió dar media docena más de pasos antes de caer
fulminado al suelo. Afortunadamente habían tenido ocasión de
aprender cuales eran los puntos débiles de esos monstruos. Eran
prácticamente invulnerables; no obstante, un balazo en la cabeza o
directo al corazón resultaban suficientes para acabar para siempre
con su infame vida. Pero en un blanco en movimiento resultaba muy
difícil atinar, de modo que el objetivo principal eran las piernas,
y cuando conseguían que cayese al suelo, un certero balazo en la
nuca acababa con el problema de raíz. Morgan hizo los honores,
asegurándose de no mancharse de sangre en el proceso. Después de
ver lo que ocurría con los que se infectaban, era mucho más
precavido.
	Ahora la calle volvía a estar en silencio. Tan solo les
acompañaban docenas de ojos curiosos que miraban desde las ventanas,
detrás de las cortinas, asustados y cobardes, rezando a todo lo
habido y por haber para que esa pesadilla acabase cuanto antes. Al
acercarse al coche no tardaron en averiguar el motivo por el que el
infame ser cuya sangre ahora se filtraba por la rejilla del desagüe
se había interesado por él. Un niño, de no más de seis años,
estaba agazapado en el suelo de la parte trasera, hecho un ovillo,
temblando de mala manera.
	Después de varios intentos, consiguieron convencer al crío que
solo querían ayudarle y fue entonces cuando quitó el seguro de la
puerta y salió junto a ellos a la calle. Había vomitado ahí dentro
y tenía los ojos rojizos de tanto que había llorado. Ahora tan solo
le temblaba la mandíbula mientras miraba al suelo, con un extraño
movimiento de atrás a alante. No consiguieron sacarle una palabra.
No podían preocuparse de él ahora, tenían todavía muchísimo
trabajo por hacer, de modo que exigieron a los cotillas vecinos que
había en los alrededores que se hicieran cargo de él. En cuestión
de medio minuto se abrió uno de los portales, después del
característico ruido de movimiento de muebles pesados, y una mujer
que perfectamente hubiera podido ser su madre, pero que no lo era, se
lo llevó adentro sin mediar palabra alguna con los policías.
	De nuevo se quedaron a solas en esa calle anónima, que en poco o
nada podía ya diferenciarse de cualquier otra de la ciudad. Se
disponían a seguir la ronda, cuando oyeron no muy lejos el
característico ruido de cristales rompiéndose, tan frecuente
últimamente, y acto seguido la indiscutible melodía de la alarma de
un coche. No hizo falta que se dijesen nada, pues ambos se dirigieron
prestos hacia ahí, dejando olvidado el cadáver del hombre que quiso
merendarse a ese pobre niño huérfano. Cruzaron la esquina a tiempo
de ver a un chico joven, de no más de veinte años, metiendo la mano
por dentro del agujero que había hecho en el cristal, y quitando el
seguro, dispuesto a llevarse el coche plateado.
	Morgan le llamó la atención, exacerbado por la situación,
apuntándole con su arma. Rafael se limitaba a mirarlo sin mucho
interés, comprobando si la suya tenía todavía munición. El chico
se giró asustado al oírle, y sacó la mano del coche, temblando de
pies a cabeza. Llevó ambas manos arriba y gritó lo siguiente
mientras los ojos se le llenaban de lágrimas y el corazón le latía
a mil por hora.
MARCELINO – ¡No disparen!
puntos 2 | votos: 6
Tanto tiempo busqué  ... - Pero al fin te encontré  tan perfecto.... como te imaginé 
LL
puntos 9 | votos: 9
Sí,eres pequeño - Pero Ocupas Un Gran Hueco En Mi Corazón.

puntos 11 | votos: 11
Esa es la cara - de mi gato cuando planea arañarme las cortinas esta noche.
puntos 17 | votos: 17
Las nuevas barbies. -
puntos 5 | votos: 7
Yo también - hago obras de arte en los margenes de los cuadernos. :D
puntos 20 | votos: 20
Lucir cuerpazo en verano - Lo estás haciendo mal..
puntos 25 | votos: 25
Preguntas de cleverbot - que te dejan sin respuesta...

puntos 15 | votos: 15
-(Cleverbot) Papaaa!! - +(Chuck) ¿Qué quieres?
-Me han insultado y vacilado =´(
+Tranquilo, ya me ocupé
puntos 7 | votos: 13
AYGG¡¡¡ - no me metas el dedo en la boca
KE ME ATRAGANTO -___-
puntos 11 | votos: 11
¿Quien eres cuando ... - ... nadie te mira?
puntos 18 | votos: 18
Desmotiva - enamorarte de un amor imposible , y saberlo imcluso antes de empezar....
puntos 5 | votos: 11
se delata el mismo - buscan a un ladron pero lo k nadie sabe es k es él o... su hermano

puntos 21 | votos: 21
PORNOGRAFÍA - DEL SIGLO IV a.C
puntos 15 | votos: 15
Desmotiva y mucho - que mi madre crea que he cambiado por malas influencias y quiere que
yo sea una  persona que no soy y no pueda mostrarme orgullosa como
otras personas como yo en mi día.
puntos 18 | votos: 18
Preguntar algo - y saber lo que te van a contestar
puntos 5 | votos: 9
Busco un chico que me consuele - aunque me haga daño, ya que los demas me haran daño pero no sabran consolarme
puntos 7 | votos: 7
Pero como no puedo - pongo mi corazon

puntos 15 | votos: 15
Mmmmm.. - Merengue Merengue!
puntos 12 | votos: 12
El futuro tiene muchos nombres - .Para los débiles es lo inalcanzable. 
Para los temerosos, lo desconocido.
 Para los valientes es la oportunidad.
puntos 38 | votos: 38
Soy un | Soy una | Soy un - brócoli y parezco|        nuez abierta, y        |      champiñón, y
un ÁRBOL.            |parezco un CEREBRO.  |  ODIO este juego.
puntos 18 | votos: 20
disfraz de putada - mitad puta, mitad hada ;)
puntos 15 | votos: 19
Desmotiva - Que después de empezar a fumar a los 13 años, de sacar malas notas y
hacer chuletas siempre, de emborracharse, de drogarse, y de abusar y
meterse con otras personas para parecer mas chulo ante sus
amigos....se sigan creyendo guays...

puntos 10 | votos: 10
No te odio! - Simplemente el echo de tu nacimiento no me ilusiono
puntos 14 | votos: 16
Existen - formas más fáciles
puntos 6 | votos: 6
-Si..si - Este para mi..jajaja
puntos 31 | votos: 31
Dientes - ya no recordaba lo suaves que erais depués de los brackets
puntos 13 | votos: 13
Amigos para siempre -





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