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05.10.2012

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puntos 12 | votos: 12
-Capítulo 5- - Nikolay despertó con un dolor de cabeza bastante intenso, y con una rápida mirada a su alrededor observó que se encontraba en la sala en donde había visto a cosa más horrorosa de su vida. Rápidamente se dio cuenta de que estaba acompañado por alguien, quien estaba de espaldas a él, Nikolay lo reconoció, era Lance, aunque se le veía muy delgado. -¡Eh, Lance!- dijo aproximándose a él- ¿Te encuentras bien? Pensé que te habrían matado. Lance no respondió. -Lance, ¿Qué te pasa?- continuó Nikolay, que posteriormente se situó delante de su compañero para verle la cara. Nikolay pegó un grito de la horrible sorpresa. Lance, como había observado Nikolay al despertarse, había perdido una cantidad extraordinaria de peso y su característico pelo largo, y tenía, como aquellos extraños monstruos, mitad de la piel de la cara completamente arrancada, como tenía ya la piel de brazos y manos. Además, Lance estaba temblando, con la mirada perdida y mientras se arañaba con fuerzas las piernas, murmuraba palabras ininteligibles. -Lance… ¿Qué te han hecho?- murmuró Nikolay. -Lo que te haremos a ti, amigo mío- era la voz de Waltk, que resonaba en toda la sala aunque, evidentemente, él no se encontraba allí. -¿Qué le has hecho a Lance?- preguntó en voz muy alta y tremendamente enfadado Nikolay. -Tranquilo, Niko, tranquilo –respondió Waltk con el mismo tono amistoso de siempre.- Todo tiene su explicación, ¿Ves esos agujeros en el techo de la sala? Nikolay levantó la cabeza, efectivamente, había unos pequeños agujeros en el techo.- Pues por ellos os está llegando un gas, por supuesto de mi invención, que te provocará a ti lo mismo que a tu compañero y los seres que has visto ayer jajaja- continuó Waltk, Nikolay no daba crédito a lo que oía, no podía existir ningún gas capaz de hacer eso. -Pero… ¡Eso es imposible! – dijo Nikolay. -Aiiii… sigues aferrándote a lo que has aprendido de los libros ¿Eh, Niko? –dijo con una voz triste Waltk.- Estáis inhalando un potente virus que no solo provocará los cambios físicos que has visto, sino que también os volverá completamente locos jajaja, además, también os impedirá dormir, ¡Por lo que podré ver como sufrís vuestra transformación con todo lujo de detalles! Nikolay intentaba asimilar lo que acababa de oír. -¡Y eso no es lo mejor!- continuó Waltk- Un mordisco vuestro puede transformar a un humano sano, ¡Imagínate el destrozo que causaríais como arma de guerra jajaja! -¡Pero eso es una locura!- gritó enfurecido Nikolay- ¡Condenarás a la humanidad! -Oh, no amigo, la fórmula del antídoto está justo aquí –dijo señalándose la cabeza- Ahora tengo que irme, parece que tu otro compañero nos está dando problemas jajaja. -Niko…- susurró Lance para sorpresa de Nikolay. -¿Pu… puedes hablar Lance? ¿Estás bien? –preguntó Nikolay -Mátame- dijo seriamente Lance mientras se giraba, temblando, hacia Nikolay. - Que… ¿Qué has dicho? –preguntó Nikolay sin creerse lo que acababa de oír. - Cuando me encerraron aquí no me quitaron mi navaja, por favor Niko, mátame antes de convertirme en eso, y que te mate yo a ti- dijo entre lágrimas Lance, mientras le tendía a Nikolay su navaja.
puntos 16 | votos: 16
Piensa antes de actuar - pero actúa.
puntos 12 | votos: 12
-Capítulo 4- - Walter Kovacs, quien prefería que le llamasen Waltk, era un doctor estadounidense conocido por sus horrendos experimentos con humanos y que durante un tiempo trabajó para su gobierno, había sido expulsado años atrás de los EEUU por la brutalidad de sus experimentos, la URSS, que pensó que Waltk podía conocer secretos muy importantes de su país, decidió acogerlo y tolerar sus experimentos, durante este período coincidió con Nikolay, pero en la URSS no tardaron en expulsarlo de nuevo, de todas formas, había conseguido seguir residiendo nada menos que en la capital del país gracias a sobornos. Su aspecto era peculiar, a pesar de que solo rondaba los treinta años, tenía ya el pelo totalmente blanco, este le caía sobre la cara en una larga melena. Su palidez, junto a su extrema delgadez y sus ojos verdes, le daba un aspecto inconfundible. Dos guardias lo acompañaban. -¿Cuánto tiempo eh Nikolay?- dijo con una amplia sonrisa y alegremente- ¿No he creado algo hermoso?- concluyó refiriéndose a la criatura que aún seguía observándolos fijamente al otro lado del cristal. -¿A eso lo llamas hermoso?- preguntó Nikolay espantando - ¿Cómo es que trabajas de nuevo para el gobierno? ¿Por qué nos has secuestrado? -Amigo mío, no trabajo para nadie, bueno, realmente trabajo para todos jajajaja. En cuanto a porque os he secuestrado, simplemente molestabais a quien me paga, y no puedo tolerarlo, aunque seas mi amigo, Nikolay- respondió Waltk - ¡No soy tu amigo! – gritó enfurecido Nikolay, abalanzándose contra Waltk inútilmente, pues los guardias reaccionaron rápido y lo sujetaron. -Sigues siendo tan impetuoso como siempre ¿Eh?, me pregunto cómo serás después del experimento jaja.-dijo waltk, que seguía hablando con un tono amistoso y paternal. -Es… ¿Experimento?- preguntó Nikolay aterrado, entonces se preguntó dónde estarían sus compañeros- ¿Dónde están Lance y Braz? -Tus amigos están bien, los amigos de mis amigos son mis amigos –sonrió- mira, quiero que veas esto. Nikolay siguió la mirada de Waltk, quien observaba a aquella cosa del otro lado del cristal. Una puerta de esa sala se abrió, y de ella salió otro ser similar al que ya había visto Nikolay, solo que este parecía más avanzado en su transformación. El primer monstruo, al verlo, se lanzó corriendo contra él tal y como hizo contra Nikolay, y el segundo respondió. Nikolay observaba aterrado como el nuevo monstruo golpeaba y mordía al anterior, que comprendiendo su inferioridad intentaba huir, inútilmente, por supuesto. A los pocos minutos, el nuevo monstruo ya devoraba los restos del más débil. Nikolay se había quedado sin palabras. -Observa bien amigo mío- habló Waltk- porque tú y tus amigos seréis así dentro de muy poco- concluyó sonriendo. Uno de los guardias golpeó a Nikolay, quien perdió el sentido.
puntos 18 | votos: 18
Todos tenemos un amigo - que solo acude a la fiesta si hay drogas, alcohol o, en su defecto, petróleo.
puntos 7 | votos: 9
Que decir - cuando sobran las palabras.

puntos 21 | votos: 21
Llorar no es símbolo de debilidad - pero todo el mundo parece avergonzarse al hacerlo.
puntos 54 | votos: 54
Creer en el destino - puede ser síntoma de que no aceptas la responsabilidad de tus actos.
puntos 13 | votos: 13
Walt_k no nos trae mejoras - nos ofrece unirnos a su secta.
puntos 16 | votos: 16
-Capítulo 3- - Nikolay despertó en una sala muy iluminada, estaba aturdido, por lo que le costó acostumbrase a la luz. Después de un par de minutos, observó con más detalles la habitación en la que se encontraba. Intentó abrir la fuerte puerta de metal de la habitación, pero era inútil, por lo que se dedicó a inspeccionar la habitación. Era un gran despacho, contaba con una mesa de estudio y una silla y en un estante había centenares de libros, también había centenares de figuras del esqueleto humano y otras clases de maquetas. Como persona curiosa que era, se dispuso a observar los papeles amontonados en el escritorio, se quedó atónito con lo que vio. Múltiples imágenes de seres de aspecto humano sin pelo, con la piel cayéndoles a tiras, o sin ella, una mandíbula prominente y un aspecto esquelético, estaba claro que el dueño de aquel despacho no era un doctor como él, sino alguno de esos frikis que creían en vampiros, zombies y todas esas estupideces. Siguió inspeccionando el despacho, era realmente gigantesco, tanto, que contaba con un pasillo que torcía a la derecha, por lo que no se podía ver lo que se encontraba al otro lado, siguió avanzando hasta torcer por dicho pasillo y se encontró con un cristal que separaba el despacho de otra sala aún más iluminada y que contaba sin mueble alguno, en esa sala había una persona, en la esquina más alejada de él y arrinconada en un rincón. -¡Eh, hola!- gritó- ¿Dónde estamos? ¿Eres un prisionero? La otra persona se giró bruscamente, y Nikolay, a pesar de la distancia, pudo observar algo horrendo. El ser de la sala contigua era similar a los que había observado en la fotografía, con la única excepción de que la mayor parte de su cuerpo todavía portaba ropa y que parte de la piel de la cara todavía estaba intacta. Era evidente que fuese lo que fuese ese ser, parecía que no había llegado a transformarse de todo en lo que quiera que fuesen los seres de las fotografías. Aquello parecía una broma de mal gusto, una broma muy bien hecha, pero Nikolay recordaba perfectamente que los habían arrestado y la muerte de Leonardo, esto no era ninguna broma. Sin embargo, como doctor que era, no podía creer en lo que veían sus ojos, así que mantuvo la calma. -¡Joder, que susto jajaja!- dijo aparentando estar lo más tranquilo posible- De verdad que esto es una buena broma jajajaja- continuó. De pronto, el ser de la otra sala se precipitó a correr en su dirección, al tiempo que emitía un grito que parecía inhumano. -¡Joder!- gritó Nikolay, esta vez muy en serio, al tiempo que retrocedía unos metros. El ser siguió avanzando a una velocidad vertiginosa, hasta que se topó con el cristal, que, jurando por el golpe se llevó, era de una extraordinaria resistencia. En el mismo instante que cayó al suelo por el choque, ese monstruo se levantó de nuevo y se acercó todo lo posible al cristal, observando fijamente a Nikolay y respirando muy profundamente, a la vez que jadeaba furiosamente. -Esto… esto es imposible… no existe tal cosa...-dijo Nikolay aterrorizado. -Sin embargo, lo estás viendo ¿No Niko? - dijo una voz socarrona a sus espaldas- Nikolay se giró rápidamente. -Tú… tú eres… Walter Kovacs…- susurró horrorizado Nikolay. -O venga ya… sabes que para mis amigos soy waltk- dijo el individuo.
puntos 12 | votos: 16
¿Qué demonios quieres ahora? -

puntos 14 | votos: 18
Y así todos los días de mi - miserable vida.
puntos 10 | votos: 10
-Capítulo 2- - -¿Cómo que nos han descubierto?- preguntó Nikolay alterado. -Cerrad la puerta y apagad las luces, puede ser que te hayan seguido- ordenó Leonardo, siempre el más prudente de los cuatro. Braz obedeció de inmediato. -Estoy seguro de ello- respondió Lance- han cogido a Vladimir, y sabéis lo que eso significa. Vladimir era el único contacto que tenían en el gobierno de la URSS, era un joven admirador de Trotsky y que desde que ingresó en el gobierno informaba al grupo cada vez que oía algo sobre ellos, como que habían descubierto su escondite, lo que les brindaba tiempo suficiente para cambiar de localización antes de que el gobierno actuase. -Maldita sea, ¡Esto es un desastre!- continuó lamentándose Nikolay- ¿Ahora qué haremos? El único lugar seguro son los EEUU, ¡Y no podemos ir allí en menos de una semana! -Tranquilízate- intervino Braz- no sabemos si Vladimir ha cantado aún, no debemos de actuar sin meditarlo antes, llamaremos la atención. -Exacto- dijo Leonardo- si actuamos cautamente podremos llegar a EEUU sin problema, mañana deberíamos partir a Novokuznetsk, allí podría conseguir un vuelo privado para dentro de tres días hacía Nueva York. -¿Creéis que no ha hablado ya? - preguntó con cierta sorna Nikolay - No sabéis lo que hace esa gente para conseguir las respuestas que quieren, ¡Puede ser que nos estén observando ahora mismo! -¡Niko! - exclamó Lance - si no te calmas voy a tener que – un ruido de motores interrumpió sus palabras - ¡Mierda, están aquí joder! -¡Tiraos al suelo! – ordenó Leonardo - Lance, Braz, situaos en la puerta, Nikolay, tú cárgame los fusiles y pásamelos cuando te los pida - añadió antes de colocarse en la única ventana de la casa lo suficientemente grande como para que pudiesen entrar los soldados. El silencio de los motores había cesado, y desde la ventana Leonardo no avistaba ni los coches ni los soldados. -¿Ves algo Leo?- preguntó Lance. Leonardo se disponía a contestar negativamente cuando vio que una persona se dirigía corriendo hacia la entrada de la casa, no dudó en disparar, el cuerpo cayó fulminado justo delante de la puerta. -¡Coged su arma si podéis! -ordenó Leonardo. Lance y Braz asintieron, este último entreabrió la puerta de modo que Lance pudiese coger el arma. -¡Listo!- exclamó Lance, y seguidamente observó la cara del supuesto soldado- ¿Qué cojones? ¡Es Vladimir! -¿Qué?- inquirió Leonardo- de pronto lo entendió, habían usado a Vladimir como cebo. Se dispuso a volver a mirar por la ventana, y justo cuando asomó la cabeza, una bala la hizo estallar. Salpicando a Nikolay. -¡Oh dios mío, dios mío dios mío! – gritó el ruso aterrorizado. -¡Mierda, Braz!- exclamó Lance- se habían distraído con el disparo hacia Leonardo y ahora una veintena de personas se abalanzaban sobre la puerta, abatieron a cinco, pero el resto consiguió entrar, golpeando posteriormente a los tres hasta que perdieron el sentido.
puntos 23 | votos: 23
No se hable más, a la principal. -
puntos 11 | votos: 11
-Capítulo 1- - Moscú, 1942 Lance se retrasaba, era frecuente en él, pero esta vez Nikolay, Blaz y Leonardo tenían un mal presentimiento, hacía ya dos años que ambos estaban expiando tanto a los EEUU como a la URSS y les parecía extraño que ninguno de los dos países hubiese actuado aún contra su equipo, más aun teniendo en cuenta que habían fracasado en Alemania, Italia, Francia, Reino Unido y España, en donde habían puesto precio a su cabeza, por lo que cada vez que uno de ellos acudía tarde a sus reuniones se temían lo peor. El cuarteto era un grupo peculiar, un ruso, un italiano, un alemán y un estadounidense. Lance siempre había estado en contra de las acciones secretas de su país, que conocía muy bien por ser un antiguo miembro de la CIA, cuando supo que había un pequeño grupo que quería luchar, no solo contra su país, sino contra otros que era evidente que cometían atrocidades, no se lo pensó dos veces antes de unirse. Nikolay, por su parte, había sido un aclamado doctor en su país, seguía siendo un férreo defensor del Comunismo, pero no había podido tolerar que Stalin, a quien conocía por haber militado ambos en el Partido Comunista, hubiese conseguido llegar al poder y condenado a su amada URSS a una época de oscuridad. Fue él quien a través de sus contactos, conoció a Leonardo y juntos formaron un grupo para expiar a las principales potencias del mundo. Leonardo era el más viejo de los cuatro, contaba ya con setenta años, pero seguía siendo un muy hábil francotirador. En sus años mozos, había sido un mercenario que aceptaba cualquier trabajo, sin importar si la víctima fuese hombre o mujer, buena o mala persona, el simplemente se limitaba a buscar un buen lugar para apuntar a su objetivo y a apretar el gatillo. Con los años había podido reunir una buena fortuna y conocer a Adriana, la que luego sería su esposa. Lamentablemente, uno de sus últimos objetivos había sido un hombre de confianza de Mussolini, quien ordenó quemar su casa, tuvo la fortuna de encontrarse de viaje cuando eso sucedió, pero Adriana no corrió la misma suerte. Desde entonces, había intentado luchar inútilmente contra el régimen de su país, hasta que Nikolay contactó con él. La historia de Braz, el más joven de los cuatro, es seguramente la más triste, era rubio, de ojos azules, alto e indiferente ante la terrible ideología del actual gobierno de su país, él se dedicaba a seguir con su vida de relojero, negocio que había heredado de su padre. No habría tenido mayores problemas con el régimen nazi de no haber sido por algo inevitable, el amor. Braz se había enamorado de una de sus clientes habituales, Adelina, que pertenecía a una familia de clase acomodada, pero judía. El amor parecía ser correspondido y luego de solo un año de noviazgo ambos decidieron casarse y formar una familia. Desgraciadamente, la vida no es un cuento de hadas en los que el mundo carece de tristeza y maldad y, en 1941, él, Adelina y su pequeño hijo Thomas fueron arrestados por sorpresa y enviados a un campo de exterminio. Su esposa y su hijo murieron a los dos meses, él, por su parte, había, tenido la fortuna, o la desgracia, de huir tres meses después de la muerte de su familia. Desde entonces, estaba decidido a matar a quien se lo había robado todo, y se unió al grupo de espías más buscado de su país y que se sabía que residía en el extranjero, su sorpresa fue mayúscula cuando descubrió que solo quedaban vivos tres miembros de dicho grupo. En el pasado, el grupo fundado por Nikolay y Leonardo llegó a contar con 20 miembros de distintos países, pero luego de sus desastrosos fracasos, habían sobrevivido solo tres miembros, uniéndose posteriormente Braz. Habían sido muchos los caídos desde el nacimiento del grupo: Francisco, Kevin, Bastian, Natasha, Mohammed… Y dichas muertes pesaban en las conciencias de los tres supervivientes. Estaban los cuatro ensimismados en sus pensamientos cuando la puerta se abrió con fuerza, era Lance, y traía el rostro desencajado. -Nos han descubierto- dijo agotado.
puntos 16 | votos: 16
Es triste ver como en un país - que se considera a sí mismo como cuna de distintas etnias y razas ocurran tales sucesos.

puntos 13 | votos: 13
Nunca debes confundir un héroe - con una leyenda.
puntos 17 | votos: 17
Pronto comenzará - la última fiesta de este insípido mundo.
puntos 19 | votos: 21
Ese incómodo momento - en el que tú mismo tienes que informar de que la policía te busca.
puntos 25 | votos: 25
¡Hasta que salga de chirona amigos! -
puntos 9 | votos: 9
Incentivar el éxito individual - provoca en ocasiones la falta de solidaridad y empatía.

puntos 11 | votos: 13
La ambición económica - de una persona y la pobreza de otra son directamente proporcionales.
puntos 7 | votos: 7
Cuando ves - que han hecho un graffiti de ti.
puntos 5 | votos: 9
Si lo hiciese una enfermera - la donación de semen batiría récords.
puntos 22 | votos: 26
El esfuerzo no garantiza el éxito - pero sirve de consuelo en el fracaso.
puntos 4 | votos: 4
Un mundo feliz - ¿Ficción o realidad?

puntos 24 | votos: 24
Hoy, en la nave del misterio - el asombroso caso del columpio que se tira a nuestras mujeres.
puntos 20 | votos: 24
Cuando no tienes concierto - y decides enseñar a una estatua a leer.
puntos 12 | votos: 12
La vida es un viaje - viajar es vivir.
puntos 26 | votos: 28
Al PP le ha faltado - un caso de corrupción más para llegar a la mayoría absoluta.
puntos 11 | votos: 13
Cuando tu plan A - es tu plan B, tu plan C,etc.

puntos 21 | votos: 21
El ser humano - puede llegar a ser el peor de los monstruos.
puntos 11 | votos: 13
Refúgiate en Internet decían, - te ayudará a olvidar a tu ex, decían.
puntos 15 | votos: 17
Mi situación sentimental, - soy el de la mierda.
puntos 9 | votos: 13
...tener las mariposas en el estómago - no tanto.
puntos 18 | votos: 20
Es increíble como una sola persona - puede ser el soporte de muchas otras.

puntos 16 | votos: 16
En una batalla lo más importante - no es para quién luchas, sino por quién.
puntos 9 | votos: 11
Para que reine la paz en la Tierra - quizás toda la humanidad deba de ser exterminada.
puntos 11 | votos: 11
Os presento mi modelo a seguir -
puntos 13 | votos: 13
Jodidamente aterrador -
puntos 13 | votos: 15
No me juzguéis - hice lo que pone el cartel.

puntos 16 | votos: 16
Todos nos sentimos - identificados con algún personaje ficticio.
puntos 10 | votos: 10
Siempre he creído que - la falsa modestia es peor que la chulería.
puntos 14 | votos: 14
Entonces es que me escondo - de puta madre.
puntos 18 | votos: 18
Cuando juntas verano y drogas - el resultado es alucinante.
puntos 13 | votos: 13
En ocasiones - nos enfrentaremos al sentido común por quien amamos.

puntos 15 | votos: 15
No importa lo que has conseguido - en la vida, es como la vives lo que importa.
puntos 6 | votos: 8
¿Dios ha muerto? -
puntos 7 | votos: 11
Walt_k - también necesita apoyo moral.
puntos 9 | votos: 11
Cuando apruebas copiando - pero tu compañero que más estudia no.
puntos 8 | votos: 12
Con el tiempo - pueden aprenderse muchas cosas, la felicidad no es una de ellas.


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