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07.01.2013

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GeekVeterano Nivel 1

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Si no arriesgas - no pierdes, pero tampoco ganas.
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Revelarse - No es siempre una opción,a veces una necesidad
puntos 6 | votos: 6
El heraldo del fin de los tiempos - Hasta hace poco mis problemas me consumían como no puedes imaginarte,
pero hoy todo es diferente. He encontrado mi propósito. ¿Quieres
saber mi nombre? Da igual cómo me llames, pues el hombre que alguna
vez fui ya no existe más. Lo que yo viví muchos lo vivieron antes
que yo, e igualmente lo vivirán aquellos que quieran dejar sus
problemas atrás, al menos hasta que llegue el fin de los tiempos.
No puedo decir nada relevante de mis primeros años de vida, me cuesta
creer que, después de tanto tiempo existiendo, no puedo recordar
ningún momento memorable de mi vida. Sólo puedo decir que fui
alguien normal, iba a la escuela, comía con mi familia, salía con
mis amigos, tuve alguna que otra novia, pero sólo eso. Jamás gané
un premio, nunca se presentó alguna aventura en mi vida, no me pasó
nada que fuera digno de contarse hasta ahora.
Me cuesta trabajo ver en qué momento se pusieron mal las cosas. Mi
padre me abandonó desde antes de que yo naciera. Mi madre siempre
estaba deprimida, no era de sorprenderse que decidiese acabar con su
vida, intoxicándose con medicamentos y alcohol. Para cuando lo hizo
yo ya era suficiente mayor como para valerme por mí mismo, y pese al
terrible dolor que me embargaba pude seguir adelante. Conseguí un
trabajo mal pagado en una tienda e intenté seguir con mis estudios,
pero tuve que abandonarlos por falta de recursos.
Mi desdichada vida pudo experimentar por breves instantes el placer de
una felicidad embriagada de excesos y perversión. La hija de mi jefe
resultó ser una excelente amante capaz de calmar las desdichas de mi
alma torturada por los medios carnales más morbosos. Más de una vez
me dijo que lo nuestro era sólo algo físico, algo pasajero y que no
debía involucrarme con ella. Créanme que no les miento al decir que
hice todo lo que estaba en mis manos para dominar mi corazón, pero
finalmente éste pudo más y terminé enamorándome de ella. Ese amor
se convirtió en una asquerosa obsesión que llevaría mi vida a un
estancamiento en la desgracia.
En cuanto ella notó que lo que sentía por ella era algo más que
sólo atracción, empezó a evitarme. Yo seguí buscándola,
enviándole mensajes, confesándole mis sentimientos, sólo para que
ella se deshiciera de mí diciéndole a su padre que la acosaba y en
consecuencia terminé perdiendo mi única manera de subsistir.
No pude conseguir otro trabajo. Logré sobrevivir unos meses
quedándome en el piso de un amigo que me estimaba; pero entre más
pasaban los días él comenzaba a verme como un parásito sin nada que
ofrecerle. Intenté buscar empleo en otras partes, pero mi carencia de
estudios no me daba muchas facilidades para encontrar uno.
Un día mientras salía de una desafortunada entrevista de trabajo, la
vi a ella, la mujer que había arruinado la poca felicidad que llegué
a tener alguna vez. No pude contener mi enojo al ver cómo caminaba
abrazada de otro hombre y descaradamente lo besaba en medio de la
calle, mientras que cuando estaba conmigo teníamos que ocultar
nuestras pasiones de la vista del mundo.
Unos minutos después lo comprendí cuando la vi subirse a un auto
lujoso, subiendo él del lado del conductor. Era evidente el por qué
no se avergonzaba de demostrar su afecto en público. Se trataba
indudablemente de un hombre adinerado que gastaba en porquerías
materialistas; que disfrutaba de la vida, ignorando lo dolorosa que
puede llegar a ser. Yo me aseguré de que el conociese el verdadero
dolor.
Me tomó más de dos semanas, pero averigüé en dónde vivía y
quemé la casa de ese maldito. Una lujosa casa de tres pisos ubicada
en la mejor zona de la ciudad. Ojalá ellos no hubieran estado adentro
cuando lo hice. Aún me atormentan los gritos de dolor que emitieron
al sentir las llamas sobre su piel, calcinando cada nervio, reduciendo
partes enteras de su cuerpo en cenizas… debió de ser una tortura
inimaginable. Inicié el incendio desde el exterior, por lo que cuando
llegó a ellos ya era demasiado tarde para escapar.
Supe que él sobrevivió con quemaduras irreversibles. Mi amada murió
en medio de la desesperación mientras buscaba la forma de escapar. Me
sumí en una terrible depresión, caí en el alcoholismo, en las
drogas y en otros vicios aún más terribles que me avergonzaría de
contarles. La policía encontró pronto pistas que los llevaron hacía
mí. Había actuado de forma impulsiva y no me había tomado la
molestia de ser cuidadoso con mi crimen. Terminé en la cárcel,
sufriendo los más terribles abusos, convirtiéndome en el juguete de
los reos más fuertes. Cada día estaba lleno de un indescriptible
sufrimiento. Por más que les cuente las cosas degradantes que tuve
que hacer, no creo que sean capaces de imaginar la humillación y el
dolor que sentí. Ustedes han tenido una vida fácil y por eso viven
en la ignorancia. Yo, en cambio, sumido en mi sufrimiento encontré el
camino hacia la verdad.
Comencé a escuchar su voz, era cálida y me confortaba. Los momentos
en los que sufría los peores abusos, él transportaba mi mente a
lugares distantes. Mientras mi cuerpo mortal era víctima de las
peores vejaciones, mi mente era libre en bosques inmensos y desiertos
llenos de una belleza espectral. Caminaba escuchando la voz que me
confortaba, pero no era capaz de verlo.
—Tranquilo hijo mío, resiste, debes demostrar que eres digno —me
dijo.
—Seré digno de usted —respondí.
—¿Realmente quieres estar conmigo?
—Sí, Señor.
—Entonces sigue caminando.
Pero por más que caminaba no podía encontrarlo, y me despertaba en
la más terrible realidad, con el cuerpo adolorido y con el espíritu
vacío, deseoso de ser parte de algo más.
Después de varios días de agonía y desespero él se presentó ante
mí. Fue durante un sueño del que jamás despertaría, pues ese
sueño pasaría a convertirse en mi nueva realidad; mientras que la
asquerosa vida que alguna vez tuve pasó a ser parte de algo onírico
e intangible.
Su cuerpo estaba hecho de una bella oscuridad. Siempre he amado la
oscuridad, no te ciega como la luz, sino que te cubre y te protege de
los males del mundo. Por eso cuando estamos a punto de ver algo
espantoso o de sufrir algo terrible instintivamente cerramos los ojos;
en el fondo todos creemos en esa protección que sólo nos da la
oscuridad.
—Hijo mío, ha llegado tu momento —dijo por una de sus bocas.
Tenía seis que salían de su cuerpo como serpientes sin ojos, y una
séptima en su rostro que permanecía cerrada e inmutable.
—Estoy listo.
—Antes debes mostrar un último sacrificio para que puedas unirte a
mí, debes ofrecerme tu alma.
¿Para qué querría yo un alma que estaba tan maltratada? Sólo
quería la paz que él me ofrecía. Quería ser parte de algo más
importante que de una realidad patética sumida en el conformismo.
—Te doy mi alma, tómala —le dije firmemente.
Entonces una de sus bocas se acercó hasta mí y me besó. Fue el beso
más maravilloso de toda mi vida. Con él todas mis preocupaciones
desaparecieron, todos mis problemas quedaron reducidos a un recuerdo
insignificante. Pude sentir cómo un calor abrazante atravesaba mi
garganta hasta salir por mi boca y pasar a la de mi nuevo amo.
—Eres más fuerte de lo que crees, el mundo te hizo débil, el mundo
te convirtió en alguien patético y conformista; pero no más, es
tiempo de sacar tu mayor potencial. Mira lo que eres ahora.
Él hizo aparecer un espejo frente a mí y pude contemplar mi nuevo
yo. Mi piel había empalidecido y mis ojos no existían más, eran
ahora sólo agujeros de negrura. Sin embargo podía seguir viendo,
incluso mejor que antes. Éste era el poder de la oscuridad.
—Perdone mi descortesía, mi Señor, ¿pero cómo he de llamarlo?
—Tengo nombres distintos en cada mundo. Muchos de ellos han quedado
en el olvido y nuevos nombres surgen de acuerdo al correr del tiempo.
En tu mundo me llaman Zalgo.
Él me enseñó su mundo. Un mundo de oscuridad sempiterna, lleno de
bosques, desiertos, ciudades; conforme más lo recorría más me daba
cuenta de las semejanzas con el mundo al que alguna vez pertenecí.
—Mi mundo está en un plano dimensional sobrepuesto a tu universo.
Somos dependientes de tu universo para que éste pueda seguir
existiendo. Por eso he de ir a ese universo y llenarlo de oscuridad,
sólo así ambos universos existirán eternamente.
Zalgo me explicó cómo su universo se alimentaba del miedo, de la
desesperación y del sufrimiento de los seres del que fue alguna vez
mi universo. Por eso requería de sirvientes que recolectasen aquellos
sentimientos oscuros que nos mantenían vivos.
—Yo no puedo abandonar este universo antes del fin de los tiempos.
Tengo enemigos poderosos y la batalla final aún no ha de ser librada.
Seguramente habrán escuchado del gato sin ojos, del muñón sin ojos,
de Jeff el asesino, del demonio que habita debajo de las camas u otros
seres que atormentan el mundo. Ellos son sirvientes de Zalgo, quienes
como yo alguna vez tuvieron una vida sumida en depresión y angustia;
pero nuestro amo se presentó ante ellos para compartir la paz de la
oscuridad. Le debemos todo, por eso yo, junto con ellos, me dediqué a
esparcir el miedo y el sufrimiento en el mundo. Elegía una víctima a
la cual torturaba incansablemente hasta que no podía dar más,
entonces simplemente acababa con su vida, y sólo entonces ese
sufrimiento y terror acumulado pasaba a alimentar nuestro universo y
garantizar nuestra supervivencia. Cualquier ser que sea capaz de
sentir miedo es buen alimento para nuestro universo, pero existe un
alimento que resulta todo un manjar para Zalgo. ¿Alguna vez has
conocido un niño tan inocente cuya ternura es capaz de hacerte
sonreír sin importar lo enojado o preocupado que estés? A ellos les
llamamos niños de luz, son niños con una capacidad especial, un
poder psíquico-emocional muy desarrollado, y tenemos nuestros
recolectores especializados en ellos. Su misma aura de luz resulta un
escudo poderoso contra nosotros, por lo que hay que atacar a
distancia, hacer que sus vidas caigan en la miseria hasta que tanto
sufrimiento los haga perecer. Pero hay que hacerlo evitando que nos
toquen, pues el contacto con ellos resultaría mortal.
Sí, somos mortales, pues nuestros cuerpos, aunque estén compuestos
de materia extradimensional, siguen siendo cuerpos físicos.
Igualmente tenemos sentimientos y también pensamos por nuestra
cuenta. No entiendo para qué sirve el alma. En clase de catecismo
alguna vez me dijeron que el alma nos hacía amar a Dios y a nuestras
familias; que aquellos que no tuvieran alma no eran capaces de amar ni
de sentir nada. Pero yo no tengo alma, y aun así amo y siento una
completa devoción por mi amo.
Debemos ser discretos y no llamar mucho la atención en nuestra tarea
de recolección de alimento. Mi amo lo dijo, tiene enemigos poderosos,
entre ellos Am Dhaegar, alguien tan poderoso que hace milenios cuando
mi amo Zalgo se enfrentó a él apenas logró herirlo y mancharse con
su sangre. Tuvo que escapar a este universo para salvarse; sin embargo
día con día se hace más poderoso, mientras que Am Dhaegar está
condenado a no mejorar. Además, no está solo, me tiene a mí y a
legiones enteras de sirvientes que lo ayudaremos en su lucha. El día
que él cante la canción del final de los tiempos nadie representará
una amenaza.
He sido tan fiel a mi amo que él me ha recompensado enormemente. Me
dio una armadura de oscuridad y me nombró su heraldo. Soy aquel que
anunciará su nombre el día que él se acerque, y así todos estarán
listos para escuchar su bella canción, la última que escucharán
antes de que todo termine. Dice la Biblia que en el principio de los
tiempos todo era oscuridad y así será otra vez cuando éstos lleguen
a su fin. Una vez que eso pase el tiempo dejará de existir. Todo
será eterno.
Han pasado años desde que estoy al servicio de Zalgo. Sigo esperando
ansioso el día en que dé la orden de que vaya a la Tierra a anunciar
que él viene. He dejado de ser un recolector para volverme algo más
importante. No sólo soy su heraldo, sino que también soy su mejor
guerrero. Mis víctimas ya no son seres inocentes, cuyo sacrificio es
necesario para alimentar nuestro universo, mis víctimas son ahora
enemigos de Zalgo. Algunos han sido difíciles de derrotar, otros han
sido simples jóvenes incapaces de defenderse. Pues Zalgo tiene una
visión que le permite vislumbrar el futuro y sabe quiénes pueden ser
posibles amenazas contra él.
Mi misión más reciente es un ser errático de orígenes
desconocidos. Nos ha estado robando niños de luz, se los lleva a un
universo lejano para que no podamos ir tras ellos. Pero sólo es
cuestión de tiempo para que caiga en mis manos. Él mismo sabe que no
es una amenaza, por eso se oculta, por eso no da la cara.
Ahora ya sabes mi historia. Tú puedes unirte a nosotros, ser parte de
la paz que nos da la oscuridad, ser uno de los que luchen en el fin de
los tiempos contra los aliados de Am Dhaegar. Sólo tienes que
ofrecerle tu alma a nuestro amo, Zalgo.
puntos 6 | votos: 6
Sie sind das Essen - wir sind die Jäger
puntos 11 | votos: 11
No hay nada más bonito - que tener a tu amigo siempre, apoyándote.

puntos 5 | votos: 7
Estos símbolos - representan una agresión a la soberanía Española. 
Por lo tanto deben estar PROHIBIDOS.
puntos 2 | votos: 2
Vaya indirecta... - ...más directa.
puntos 7 | votos: 7
Tener miedo a enamorarte, - por un pasado que a sufrido bastante.
puntos 19 | votos: 19
Querer crecer más rápido puede - ser una perdida absoluta de volver a recuperar las oportunidades que se fueron.
puntos 14 | votos: 14
Abandonar - puede tener justificación; 
abandonarse no la tiene jamas

puntos 1 | votos: 1
No es buen músico aquel que - simplemente se concreta a tocar bien, es mejor aun aquel que aprende a
compartir con otros lo que sabe
puntos 11 | votos: 11
Las oportunidades son como - los carteles recomendados, siempre las habrán, pero no en todas se
obtiene lo querido.
puntos 7 | votos: 7
Después de esto - tienes criterio en tus palabras.
puntos 0 | votos: 0
El Miedo - fruto de nuestros pensamientos...
puntos 0 | votos: 2
Tratar de encontrar - a esa persona cueste lo que cueste, para estar por siempre a su lado

puntos 5 | votos: 5
Esa creyente - llora más a su dios, que a un familiar.
puntos 1 | votos: 3
Que nadie te juzgue - por tu apariencia, sin antes conocer tu historia.
puntos 6 | votos: 8
Pena. - Es lo que siento hacia vosotros cuando leo que le insultáis. 
No vais a ser más inteligentes ni parecer más alternativos por ello,
¡creced!
Justin Bieber es un cantante canadiense, ídolo de masas seguido por
muchas fans que le quieren, a él y a sus canciones. ¿Tan vacías
estan vuestras vidas como para que eso os afecte? ¿En serio? 
Sí, vale, hay niñas que se pasan al extremo defendiéndolo, pero
suelen ser niñas pequeñas, por Dios, ignorad lo que dicen y ya
está. ¿Qué vais a cambiar insultándolo? ¿Seréis más guays?
¿Más popus? ¿Más jebis? Pues vaya mierda, yo no quiero ser algo si
para ello tengo que degradarme hasta insultar a un chico al que ni
siquiera conozco.
Quizás os suene muy guay hacerlo, pareceréis más
tumblr-alternativo-cultos y musicalmente superiores, pero no lo
seréis en absoluto.
Luego, haréis carteles en contra del bullying, pero eso después de
insultar a una belieber que sólo puso Justin eres mi vida o algo
por el estilo.  ¿No os dais cuenta? De veras, reflexionad en si vale
la pena hacer este tipo de cosas. 
Un poco de respeto y madurez no viene mal nunca, si supiérais la
lástima que dan algunos comentarios de los anti-biebers, quizás os
plantearíais el suicidio. U os daría tanto sida como me dáis a mi.
puntos 4 | votos: 6
Dylan Klebold no es culpable - de ninguna masacre. La culpa la tuvieron aquellos que le despreciaron,
insultaron e hicieron bullying. Él sólo decidió tomar medidas,
puesto a que nadie lo hizo antes. No es un asesino malvado, es alguien
introvertido e inteligente que se hartó del acoso escolar y decidió
terminar con todo, es mi ídolo.
puntos 17 | votos: 17
No tenéis por qué leer el cartel. - SÓLO ES PARA DESAHOGARME CONMIGO MISMO. Lo primero, sí, es foto
tuenti, si queréis denunciarlo por vulgar nadie os lo impide. El
problema vuelvo a ser yo, joder, otra vez yo. Me siento tan solo que
necesito hablar con gente, pero eso me vuelve pesado y agobiante. A
veces quisiera ser menos sensible, porque ser sensible es lo que más
daño me hace, cualquier puta cosa me puede hundir y hacerme explotar
a lágrimas. Por culpa de mi sensibilidad me hago daño a mí mismo. A
veces me duele ser como soy, pero no puedo cambiar. Hago muchos
carteles tontos y comentarios gilipollas, pero sólo intento estar
bien, porque si no los hago me deprimo. Estuve 5 años de depresión
sin contárselo a nadie, yo creía haberla superado, pero quizás no
es así, sólo me miento para mi propio bien. Pero al final, me vengo
abajo, da igual lo que haga, siempre acabo hundido y llorando. Intento
hacer sonreír a la gente y ayudarla con sus problemas porque quiero
sentirme alguien, y no sentirme el estorbo que siento siempre que soy.
A veces pego puñetazos al colchón, otras veces a las paredes, pero
en verdad todos esos puñetazos me los daría a mí mismo por ser tan
capullo como soy. Lucho siempre que puedo, lucho por estar bien, pero
nunca consigo estarlo del todo, y si lo consigo es durante muy poco
tiempo. Es imposible querer convertirse en alguien sin sentimientos,
pues siendo tan sensible como soy no se puede cambiar a eso. Pero para
no echarme la culpa del todo, que no quiero decir que yo no tenga
culpa porque sí la tengo, también es culpa de que no reciba cariño,
pues eso me hace ser duro a veces conmigo mismo, y que cuando me dan
un poco de cariño siento celos de otras personas. Lo que me faltaba,
vaya escoria estoy hecho, coño. Además también tengo mucho miedo al
rechazo de las personas, ya lo conté en otro cartel, y eso me hace
tener miedo a que pueda perder a quien considero amigo, y entonces me
destroza ese miedo, como todo. Cada noche que pienso me lío en mis
sentimientos y me pongo nervioso e incómodo, necesitando llorar
muchas veces. Pero eso es bueno, llorar no es de cobardes, es de
fuertes que sacan su puto dolor, de personas que se atreven a querer
buscar el bienestar y luchar por estar bien. Considerándome tan
defectuoso como me considero, al menos, creo tener la virtud de ser
fuerte cuando menos lo espero, y tengo que usar mi fuerza, junto a las
de mis amigos para estar bien, y también, para ayudar a la gente a
estar bien.

puntos 6 | votos: 8
Días de furia, - días de historia.
puntos 9 | votos: 9
Criticar la intolerancia - es la droga de los intolerantes.
puntos 137 | votos: 141
Cuanto más quieras - a una persona, más te costará mostrarle tus sentimientos.
puntos 7 | votos: 7
En la Alemania del Este - el ciempiés humano se hace uno tras otro
puntos 5 | votos: 5
Para que no me recuerdes. - Dijiste que ibas a escribirme. Que ibas a escribirnos.
Prometiste no serlo todo, pero ser suficiente.
Decías que nunca habías conocido a nadie parecido. Que nunca habías
sentido algo así. Que todo cambió al conocerme a mí.
Y tú no sabías que fuiste tú el que cambió algo en mí.
Te di mi confianza, te vendí mi físico, te deje entrar en los
recuerdos que más me dolían para terminar siendo tú uno de ellos. 
Eras tú el que decía que podía confiar en ti, pero, ¿cómo puedo
confiar en alguien que no conozco?
Y ahora dime, ¿qué debo hacer yo? ¿Cómo debería sentirme después
de ser traicionada por una persona que me dejo confiar y me falló? 
No fuiste el primero, ni tampoco serás el último.
Pero pensé que quizá...
No te mereces estas lágrimas, ni estos versos, ni nada de mí.
Prueba a apretarte el corazón con el puño, todo lo fuerte que
puedas, y no lo sueltes. Ya sabes cómo me siento.
Que eres un completo gilipollas y un cobarde. Y ni si quiera sé
porqué me importa.
Y es irónico que mientras escriba esto sólo me acuerde de las cosas
buenas, quizá no mereces que te odie.
Y tu voz..
Como decías mi nombre al coger el teléfono. Como te reías cuando
apenas al decir unas palabras iba corriendo a por agua.
Quizá si te acordases de todo eso sabrías cómo me siento.
Pero ni escribiéndote la carta más bonita lo entenderías.
Te recuerdo que sólo viste de mí lo que yo te dejé ver.
Y siento tantas cosas a la vez, que realmente no siento nada.
No me merezco esto, tú mismo lo dijiste.
De hecho, creías imposible encontrar a otra lo más parecido a mí. 3
semanas exactamente.
Y créeme, me alegro. Me alegro muchísimo.
Pero esta vez ya no.
Esta vez me toca decir adiós.
Y que te den por culo.

puntos 4 | votos: 4
15/15 - La fragancia del presente
puntos 8 | votos: 8
Ve por dónde vas - ten cuidado al caminar 
algo horrible te saldra y te hará gritar!
El terror es nuestro fin. 
¿Te asusté? ¡Asi sera! 
Una vez, otra vez, todo aqui es alreves 
bajo la luna en la oscuridad. 
¡Vamos a gritar! ¡Gritos hasta el fin!
puntos 2 | votos: 6
Recuerda - Darle gracias a Dios, Sobre todas las cosas.
puntos 6 | votos: 6
Mierda -
puntos 10 | votos: 10
El problema - es que tú eres la solución.

puntos 26 | votos: 26
Te das cuenta - que amas a alguien cuando no te importa que la otra persona sea feliz
con alguien más.
puntos 5 | votos: 5
Hay acciones pro humanidad - que me confunden si son verdaderamente para beneficio de la misma.
puntos 15 | votos: 15
Chicas Gamers - realmente pocas
puntos 8 | votos: 8
En ocasiones - inventamos villanos para superar el hecho de 
que tal vez, nos hallamos convertido en uno.
puntos 3 | votos: 5
. - Por qué será, que tu sabor ya no me asquea
Por qué será, que al mirarte me corre odio por las venas

puntos 7 | votos: 9
Nach - El chico que jamás encontró afecto
en una sociedad infecta que solo acepta hombres perfectos.
puntos 5 | votos: 5
Juzgar a un chico - Por llevar maquillaje, es juzgar a una chica por llevar pantalones
puntos -7 | votos: 11
Obedece las instrucciones - es por tu bien.
puntos 13 | votos: 13
Reggeton - Nivel: Clasico
puntos 7 | votos: 7
Hay quien ve la soledad - como algo  terrorífico y otros la vemos como
un momento de reflexión sobre la vida en si.

puntos 13 | votos: 13
En los estados de Facebook, - al lado de estos botones hace falta uno que diga: 
Me importa una puta mierda.
puntos 3 | votos: 3
Chicos... - Os gustaría ser como Barney, pensáis que sois como Ted pero en
realidad sois como Marshall.
puntos 14 | votos: 14
Sexo - Lo unico capaz de hacer que alguien te preste atencion cuando esta jugando.
puntos 9 | votos: 9
Vacía. - De repente, llega un día en el que te despiertas y te sientes vacía.
Ni bien, ni mal. Vacía. 
Es como cuando te saltas una de tus comidas diarias y te duele el
estómago, porque sientes que te falta algo. Y es que hay veces en las
que sabes qué es ese algo, pero también hay otras muchas en las que
no. Y, ¿qué hay peor que echar de menos algo que no puedes
conseguir?
A mí me falta él. Me falta un nombre. Una cara. Una persona. Eso es,
me falta una persona a la que aún no conozco. 
Me falta una persona que me quiera como soy. Una persona a la que
dedicarle canciones. Una persona que no me haga llorar. Me falta decir
mi típico siempre igual en tono alegre. Crear la palabra
desefímero, o inefímero, quizás. 
Me da hasta pena leer las gilipolleces que escribo. ¿Desde cuándo
soy yo así? 
Cuando era pequeña, me hablaban de la adolescencia como la mejor
etapa de la vida: amigos, fiestas, novios, hacer todas esas cosas que
no podía hacer porque era demasiado pequeña... En fin. Sólo
mentiras. 
A mí nadie me habló de los complejos. De los puñales que me iban a
clavar mis queridos amigos. De la cantidad de lágrimas que iba a
derramar por culpa de cualquier anormal con ganas de otra chica más.
Nadie me contó que las letras de las canciones iban a empezar a
cobrar sentido. Que la gente se iba a olvidar de mí. Que iba a tener
que esforzarme tanto para conseguir lo que quisiera. 
Nadie me despertó. La realidad tuvo que ocuparse de ponerme una
alarma y hacerme caer en la cuenta de que éste no iba a ser mi mejor
momento.
puntos 6 | votos: 6
Hay personas que son capaces - de transformar las palabras en arte, 
pero solo ÉL es capaz de ver el arte en las palabras.

puntos 4 | votos: 6
Abre tu mente - antes que tu boca
puntos 11 | votos: 11
Lo que sientes - cuando el peluquero, te corta el pelo.
puntos 13 | votos: 13
El dolor - cambia a la gente, incluso te hace sentir cosas que antes serían impensables.
puntos 11 | votos: 11
Giro la vista atrás y ahí os veo, - haciendo que valga la pena MORIR.
puntos 14 | votos: 14
Cuando - el espíritu es lo único que nos hace fuertes.





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