El problema es del que hace la pompa delante de tus narices. Te lo está pidiendo... es que te lo está pidiendo...

Es que cualquiera se fía de la profe de mates.

El problema es cuando lo haces en medio de clase y el profe te pide que te vayas del aula.

Seguro que más de un tío también se asusta cuando ve un bicho, pero la sociedad no se lo permite y tiene que aparentar que es todo un "machito". En cambio, si vosotras os ponéis como histéricas y subís a una mesa, a nadie le extraña.

Te han pillado...

Lo mejor será que, cuando tengáis hijos, os comportaréis igual que vuestras madres ahora. Me juego lo que queráis.

Os recomiendo esperar a que el aceite de la sartén esté bastante caliente. Por cierto, enhorabuena, no sabrás hacer tortillas, pero ya escribes "revuelto" correctamente.

Pero mucho peor es la gente que te pide que te quedes sin patio porque tienen que terminar un trabajo de inglés en el aula y, al final, le tienes que decir tú las preguntas sobre las olimpiadas.

Lo peor de todo no es que se trata de un pecado capital (¿te acuerdas de la película Seven?), sino que, según dicen, es el peor de todos. Porque suele ser el que provoca padecer luego cualquiera de los otros seis.

Ya sabes que mi comentario iba dirigido con ironía. Como ejemplo, he comentado otro cartel vuestro por usar incorrectamente una preposición. En cuanto a Jeremy, es el nombre de una canción.

Perdona que te corrija, pero has usado incorrectamente la preposición. Es estar a dieta, no en dieta. Vaya profesor de lengua castellana debes de tener...

Con la pereza que da tener que meterlas todas luego.

Y provoca que la MTV pueda hacer programas como "Madre a los 16".

Y que el viernes sea friday (free-day) y tengamos que ir a trabajar.

Ni Gustavo Adolfo Bécquer podría ser tan cursi.

En el fondo, para que gente como tú pueda hacer un cartel.

Aunque, te recuerdo, que llegará un día en que la gente que pase por encima no sabrá quiénes son.

Vaya repelente, corrigiendo faltas de ortografía... Ni que estuviéramos en clase de castellano.

Me pregunto, ¿de dónde habrás sacado esta idea?

... tampoco podía decir que su perro se había comido el pen-drive, porque esa excusa ya la había utilizado.

¡Qué bueno! Recuerdo que, un día, un profesor dijo en clase algo parecido.