No se que consideran delito

¿donde acaba el delito y comienza el arte?

@GoldenGirl, jajajajaja!!! ¡¡Eso es genial!! ¡¡Oye, tendría su encanto!!!

@GoldenGirl, Ya pero eso no es tu habitación es un metro.

@alika, Espacio público de todos, con más razón. Es de todos y a la vez de nadie, por lo que nadie te da permiso a modificarlo a tu gusto, sino las abuelitas no sé... A lo mejor ponen mantelitos o cuadros de gatos en el metro xD.

@GoldenGirl, la cuestion es que esto esta pintado fuera del tren(lo que seria la fachada de un piso) y no dentro (la habitacion que va a pintar mi profesor de matematicas) xDD

@circonita, Sería un método didáctico revolucionario =P.

@GoldenGirl, Ya bueno pero si no hacen espacios para pintar,por ejemplo hay en ciudades en las que ponen muros expresos para que pinten,es una via mejor que poner multas.

@StartingNowOtherChance, Bueno, pues en el pasillo de tu casa, que no pertenece a tu habitación xD.
¡JODER! Son ejemplos, no me jorobéis mis teorías =( Jaja!

@GoldenGirl, igual hasta le juventud le haria mas caso a las matematicas jaja

@GoldenGirl, Vale,pues entonces seria el pasillito del tren xDDD
I always win

@alika, Pero hay un montón de muros por ahí que pintar. A ver que sí, me parece muy mal que no tengan un sitio para pintar...
Hay grafiteros que pintan sobre lonas... Es otra opción Jeje!

@GoldenGirl, Ya muros que pintos los cuales en todos ponen multa,las lonas si te pillan tambien te ponen multa, por eso la gente s ela lleva a su casa las pinat y las vuelve a dejar ;)

@alika, Bueno, no sé como está la justicia en ese tema, pero para mí pintar un tren, que es propiedad pública, es delito. Y que conste que adoro el graffiti, me parece tan digno de llamar arte como un cualquier cuadro de un museo.
Otra cosa es que debieran de regular un poco espacios para pintar y demás ;).

@GoldenGirl, Ya pero es obvio que si no dan espacios, pues se buscan.

@GoldenGirl, Ya pero entonces se hace honor a la frase "mi libertad termina cuando empieza la del otro".
Hay gente que no tendrá la libertad de disfrutar de la fachada normal del tren porque otro utiliza su libertad para moldearlo a su gusto.