Resulta muy curioso que seamos capaces de perdernos en la mirada de alguien, alguien que creemos conocer en un 100% y que sabemos que nos conoce, me encanta introducirme en la profundidad de los ojos de alguien.

Pero sea o no sea ese el objetivo, la vida nunca será justa, ya sé que es una forma de hablar, sé que somos nosotros los que decidimos lo que hacer; en esas decisiones que tomamos pueden haber consecuencias justas o no.

A veces no es fácil estar contento, y estar triste es muy fácil, es que a veces eso lo determinan las personas que nos rodean, sus actos, sus forma de ser...

Hostias, es ecuatoriano.

Siempre me ha parecido hermosa esta imagen, una familia que disfruta de algo en común, aunque el niño no tengo uso de la razón, espero que empiece a gustarle las mismas cosas que sus padres, y sino, alguna que otra, al menos así tendrá temas que tratar con sus viejos.

Copia o no, cada persona elige ser de una forma, a mí me parece muy egoísta que se critique esto, ¿sabes por qué? porque siempre ha estado de moda criticar, al hacerlo estamos siendo copia de alguien que en su día empezó.
Cada uno elige la vida que quiere llevar, no tenemos ningún derecho a meternos.

Ningún regalo material debería servir para pedir perdón, sólo tendría que bastar la sinceridad, las palabras que dicta que digamos nuestro corazón, pero no las malas palabras, sino las que llevan en sí sentimientos verdaderos.

No todos somos tan valientes de autocriticarnos, a mí lo que me da grima es cuando alguien tiene una vida de mierda y en vez de aceptarse e intentar arreglar o mejorar su propia vida; se mete en la de los demás, utilizando palabras despectivas, con un cierto aire de egocentrismo con el fin de hundir a esas personas.
¿Qué coño pensarán?
¿Se creen mejores al hacerlo?
¿Tan vacíos y tan deprimentes son?

Cada persona evade de una forma distinta sus agrios recuerdos, es libre de hacerlo, es una lástima que algunas veces esas formas de evadir cosas sea muy perjudicial para ellos mismos, pero hoy en día todos sabemos las consecuencias de nuestros actos antes de cometer éstos.

Sería increíble que todos o una gran mayoría fuésemos capaces de saber como un adulto y mantener dicha ilusión de la niñez, pero es imposible, rara vez se puede tener ambas.

Empiezas a madurar el día en el que te das cuenta de los errores que cometes y de las consecuencias que contraen éstos mismos. Aunque lo de "madurar" es muy relativo, nunca maduramos del todo, simplemente aprendemos a comportarnos dada la situación en la que nos encontramos.

Siempre se ha dado el caso de que las personas con menos recursos (medios) son capaces de hacer cosas verdaderamente impresionantes dignas de admiración.
Y resulta curioso que personas teniendo los medios idóneos no sean capaz de llevar a cabo cosas similares.

De toda la vida dentro de un conjunto, grupo, equipo ... o como quieras llamarle hay división, hay intereses propios, cada uno realiza una función diferente a la de otro, el problema llega cuando dicha función es más importante que otra, y si así es hay que admitirlo, allí es cuando se produce una separación de dicho esfuerzo en general.

En realidad nuestro subconsciente no puede salir de nuestra cabeza, y para eso tendríamos que tener claustrofobia, pero eso sí, desgraciado aquel que tenga claustrofobia y se sienta atrapado en su propio cuerpo, específicamente aquel que se sienta atrapado en su propia cabeza.
Me he rayado, parezco un político hablando.

Hay personas que allá donde van producen caos por puro aburrimiento, esas personas son incendios.
¿Cómo pararles? Con un guantazo en casos muy extremos o si se es más civilizado y suficientemente maduro; pasando de ellas.