(:

  

 En Desmotivaciones desde:
22.04.2011

 Última sesión:

 Votos recibidos:
bueno 489 | malo 24
La razón de baneo:
voto masivo


puntos 20 | votos: 20
Sonrisas - que consiguen sonrisas
puntos 6 | votos: 6
Lo que no entiendo, - es que por qué hablan todos de que son diferentes.
puntos 4 | votos: 4
Pim Pam - toma lacasitos
puntos 7 | votos: 7
Eres como el sueño - de una realidad.
puntos 10 | votos: 10
No hay más inocencia - que la sonrisa de un niño

puntos 11 | votos: 11
Soñar no cuesta nada, - lo que cuesta es el trabajo y empeño que pongamos 
en aquello que queramos cumplir.
puntos 11 | votos: 11
Ver que anuncian cualquier cosa - de tu serie favorita de pequeño,
y quererlo a toda costa.
puntos 4 | votos: 4
No sé.. - Ni idea.
puntos 12 | votos: 12
Me gustaría tocar  - la dulce sinfonía de tu corazón.
puntos 15 | votos: 21
El chat prohibido... - Un día me dijo que era vidente, y no es que no le creyera, pero me
muestro generalmente bastante incrédulo respecto a estos temas. Lo
que no veo, no existe para mí. No digo que debiera haberle creído
sólo porque le estimaba ya que en mi opinión la amistad y la
confianza son muy importantes, pero simplemente hice un esfuerzo y le
di el beneficio de la duda. ¿Y si era yo el que estaba equivocado?.
No volvimos a hablar del tema hasta que un día volvió a aparecer en
el chat donde estábamos hablando y me envió un privado. Era una de
esas ventanitas que sólo podíamos ver ella y yo. Absolutamente
privado.

ELLA - Hola, ¿seguimos el tema? 
YO - ¡Vale! Pero no creo que puedas convencerme, ya sabes... me
cuesta creer estas
cosas.

ELLA - No pretendo convencerte de nada, pero nací con ciertos dones y
tampoco tengo
intención de ocultarlos al mundo.

YO - Eso debe estar bien.

En realidad no sabía qué decirle. ¿Estaba bien? En fin... poco
podía decir yo al
respecto.

ELLA - Está bien, pero no siempre. Cuando tengo una visión acabo
agotada. 
YO - ¿Te supone un esfuerzo?

ELLA - Sí, bastante esfuerzo.

YO -¿Y por qué lo haces?

ELLA - No es algo que se elija, se nace con ello.

Hubo un silencio en el que ninguna de las dos parecía saber qué
decir. Miré la web
donde nos habíamos conocido siete meses atrás. Estaban hablando de
las próximas
vacaciones de verano.

ELLA - ¿Sigues ahí? 
YO - Sí, ¿no puedes verlo? .-Bromeé.

Entonces dijo algo que me asustó.

ELLA - Sí, puedo verte.

Tragué saliva y pensé, vaya, me está tomando el pelo y yo caigo
como un tonto. 
Sentí un escalofrío pero decidí presionarla.

YO - ¿Ah, sí? Pues dime... ¿con quién estoy? 
ELLA - Solo

Bueno, eso podía haberlo comentado antes en el chat y que ella lo
hubiese leído.
Decidí seguir con aquello como si se tratara de un juego.

YO - Dime algo que me sorprenda. Algo que veas en mi habitación. 
ELLA - Veo que tienes algunas de las teclas de tu ordenador borradas.
Tecleas rápido.

YO - Ya, pero eso puede pasarle a cualquiera. Las letras de los
teclados se borran.

ELLA - Tú tienes borrada la A, la S, la L y la M.

Miré mi teclado más curioso que horrorizado, pero de la curiosidad a
la ansiedad
hubo tan sólo un instante. Ya no me hacía tanta gracia el juego. Mi
condición de
incrédulo, no obstante, me hizo ir más allá.

YO - ...estoy segura de que casi todos tenemos las mismas letras
borradas. Dime
algo que sorprenda de verdad. 
ELLA - ¿Por qué quieres seguir con esto si no me crees?

Buena pregunta, pensé.

YO - Igual para conocerte un poquito más, o para experimentar algo
que no haya
experimentado antes.

En ese momento supe que ella sonreía desde su lado del monitor.
Internet es un sitio curioso. Estás en tu casa, en camiseta de manga
corta y pantalón corto, descalzo y con el ventilador puesto cuando al
otro lado de la pantalla alguien te habla abrigado hasta el cuello,
con un par de calcetines y la estufa puesta porque tú estás
disfrutando del inminente verano y ellos aún están pasando el clima
del invierno.

Mi amiga se había mostrado siempre amable, abierta, simpática y con
un buen sentido del humor. Se podía decir que coincidíamos en todo
menos en este tema.

ELLA - ¿Cómo llevas el libro? –Preguntó de pronto. 
YO - ¿Qué libro?

ELLA - El que tienes encima de la mesa... déjame ver... La fuerza
bruta, de John
Steinbeck.

Miré a mi derecha con los ojos como platos. ¿Se lo había dicho?
¿Le había dicho que lo había empezado o que iba a leerlo? ¿Le
había dicho que solía poner los libros en mi mesa porque me
encantaba mirar una y mil veces las portadas de los libros que me
estaba leyendo? Evidentemente, la respuesta debía ser sí.

YO - Acabo de empezarlo.

Lo escribí sin dejar notar nada sobre mi –todavía- sorpresa.

ELLA - Yo no lo he leído. 
YO - Ya te diré qué me parece.

En el chat general el tema de conversación giraba en torno a las
lanchas motoras. No me pareció más interesante que mi conversación
en privado y me puse a pensar qué podía preguntarle para descubrirla
o rendirme a sus pies definitivamente. Pero habló ella.

ELLA - Alguien va a llamar a la puerta. 
YO - Ah, pues ve, te espero.

ELLA - No. Es en tu casa.

Sonreí incrédulamente. Iba a poner una risa (jajajaja) cuando sonó
el timbre. Miré hacia la puerta de la habitación. Mis ojos volvieron
a la frase premonitoria de mi amiga.

YO - Ahora vengo. 
ELLA - Ok.

Llegué hasta la puerta y miré por la mirilla. Un vendedor de
alfombras. 
- No me interesa. –Dije para no tener que abrir. 
El chico dijo algo que sonó despectivo y se marchó a otro piso. 
Volví al chat.

YO - ¿Cómo lo sabías? Era un vendedor de alfombras. 
ELLA - Te he dicho que puedo verte.

Sospeché la posibilidad de que tuviera razón pero mi sensatez lo
negaba una y otra vez. No había nacido yo para creérmelo todo, y
menos aún aquello que escapaba a la lógica. Mi amiga no sólo estaba
en su casa, sino que estaba en otro país y teníamos distinta franja
horaria.

ELLA - ¿Sabes? Algo me dice que debo seguir mirándote. No te asustes
pero... 
YO - pero???????

ELLA - Es que no sabría explicártelo. Generalmente tengo visiones
premonitorias, otras veces, como hoy, puedo provocar el verte.
Aparecen imágenes frente a mí y te veo, veo tu habitación, pero
esto supone un gran esfuerzo. Me duele la cabeza.

YO - Ya, pero... ¿y el “pero” que decías?

ELLA - Es que no quiero asustarte pero presiento algo raro.

YO - Ahora sí que me estás asustando.

¡Pero qué poca firmeza tenía, por Dios! ¡Ahora estaba asustándome
de verdad! Yo, el
incrédulo, el que si no ve, no cree. Me sentía agitado. Quizás se
debía a que eran
pasadas las once de la noche ya, estaba solo en casa y la última
persona que había
visto había sido un desconocido poco amable desde una mirilla. Al
menos aún podía
escuchar el volumen alto de un televisor. Era mi vecina, una viejecita
que estaba
algo sorda.

YO - No sé pero... quizás deberíamos cambiar de tema. 
YO - No es que me hayas convencido pero...

ELLA - :) No te preocupes, te entiendo. ¿Tengo tu permiso para seguir
observando?

YO - Claro, pero que conste que no tengo tan claro que puedes verme.
Mi sesera me
impide creerte. :)

Miré de nuevo el chat para ver si surgía algún tema en el que
pudiera involucrarme
pero estaba parado. Había unos siete miembros en el chat y ninguno de
ellos hablaba. 
Todos estaban en privados. Miré la ventanita del privado de mi amiga.

Iba a escribir algo cuando ví que ella se me había adelantado.

ELLA - Cielo, quizas ahora te asustes pero.. no estás sola.

Sentí un escalofrío en mis piernas y mis brazos. Tanto se erizó el
vello que me
dolió. ¿Cómo se podía calificar a uno de “cielo” para luego
decirle que no estabas
solo en la habitación?.

YO - ¿Qué quieres decir? Me estás poniendo nervioso. 
ELLA - No puedo identificarle pero está detrás de ti

YO - Por favor para

ELLA - No se mueve casi, no te asustes, déjame observarle.

YO - Estoy asustado.

Ahora sí que lo estaba. Miraba la ventana. Oscuridad total. No me
atrevía a girarme
hacia atrás. ¿Y si veía algo que no quería ver? ¿Y si allí
estaba mi amiga? ¡u otra
persona! Eso aún era peor... comencé a notar un nudo en la garganta.
Hubiera querido
ser más valiente o más cobarde y llorar, pero estaba estancado en mi
propia lucha
para creer o no creer.

ELLA - ¿Notas frío a tu alrededor?

Su pregunta me llegó casi cuando estaba a punto de apagar el
ordenador y encender la
luz del techo para meterme rápidamente en la cama y olvidarme del
tema.

YO - Estamos a más de 30 grados.- Le informé. 
ELLA - Ok. Es que no consigo entrar en él.

YO - ¿¿¿EL??? ¿entrar??

ELLA - Se muestra como una estatua por eso no me deja descubrirle. No
sé si es bueno
o tiene malas intenciones. Sólo sé que está ahí, estático.

YO - Yo no veo a nadie... esto no me gusta.

ELLA - Ya te dije que no te asustarás, cielo. Además, yo estoy
contigo.

YO - Sí, a miles de kilómetros de distancia.

Entonces lo noté. Una especie de roce helado, como si hubieran puesto
una mano sobre
mi brazo. En la zona donde la sentí el pelo de mi brazo se erizó.
Completamente en
alto. El resto de mi cuerpo no notó nada.

YO - ¡Está pasando algo! 
ELLA - ¿Qué??

YO - He sentido un frío helado en mi brazo.

ELLA - Tranquilízate.

YO - Se me ha erizado el pelo, tengo una extraña sensación.

Comenzaba a ser pánico.

ELLA - Cielo, tranquilo, hazme caso. 
YO - Esto es muy raro

YO - Estoy asustado

YO - Necesito tranquilizarme, estoy.... joder!

YO - joder joder joder joder joder

ELLA - ¿Quieres dejar de escribir?

YO - joder joder joder joder joder

ELLA - Te va a dar una taquicardia, tranquilízate.

Y entonces noté un soplo frío en un mi cuello, como si me hubieran
tirado el aliento.

YO - ¿Qué significa el frío del que me hablabas? 
ELLA - El frío lo transmiten los muertos cuando se acercan,
generalmente algo
enfadados o...

YO - ¿OOOOOO??????????

ELLA - violentos

YO - ¿VIOLENTOS?????

YO - Joder ayúdame, qué hagooooooooo?????

ELLA - Tranquilízate, yo no lo he visto moverse.

YO - ¡Haz algo!

ELLA - Cielo ¿quieres tranquilizarte?

YO - ¡Hay alguien conmigo joder! Tengo un muerto tirándome su
aliento en mi espalda,
estoy acojonado estoy asustado estoy llorando

ELLA - Cielo.... ¿te importaría escucharme? Deja de escribir y lee
esto

Hice un esfuerzo. Para mí escribir suponía no mirar atrás y leer
palabras, ya fueran
suyas o mías, sentirme menos solo en mi habitación.

ELLA - No hay nadie, cariño. 
YO - Lo dices para tranquilizarme.

ELLA - NO HAY NADIE

YO - Está aquí, lo siento, lo presiento lo notooooooo

ELLA - Ok. Escúchame. Era broma.

YO - ¿Broma????

ELLA - Quería demostrarte que no existen los incrédulos, cálmate
por favor. Yo no veo
nada, es cierto que a veces tengo visiones premonitorias, como cuando
han llamado a
la puerta, pero no puedo obligarme a ver a nadie.

YO - pero yo siento algo

Esto último lo escribí con lágrimas en los ojos y más asustado que
nunca. 
Sus palabras no me tranquilizaban. Las lágrimas a veces me impedían
leer bien pero
me las quitaba restregándome en segundos los ojos o apretando los
párpardos para que
salieran disparadas y dejaran de molestarme.

ELLA - Voy a llamarte por teléfono.

Pocos segundos después sonaba el timbre del teléfono. ¿Había hecho
ella misma una
conferencia para convencerme de que no existían las videntes ahora
que ya me lo
había creído?. Fui a descolgar pero ocurrió algo que congeló mi
mano en el aire.

ELLA - Cielo, no puedo llamarte sin desconectar esto. Sólo tengo una
línea. ¿Puedo
llamarte o prefieres que sigamos aquí?

Cuando ya tenía puesta la mano en el auricular ví su privado.
¿Cómo podía escribirme
y llamarme a la vez? Miré el identificador de llamadas antes de
descolgar. No había
número, era anónimo. No era ella. Eso lo tenía claro después de
haber visto el
privado.

Respiré hondo y dudé entre contestar al privado o descolgar el
teléfono. Me decidí
por la llamada. 
- Dígame. 
- Tu amiga va a a morir mientras tú escuchas este mensaje.

Jamás había sentido tanto miedo y jamás en mi vida mi corazón
había dado un vuelco
tan grande ni mis piernas –aún sentado- me habían fallado con tal
rapidez. Me hice
de mantequilla. Comenzó a darme vueltas la habitación y luché por
recuperar el
aliento.

De pronto la línea se cortó y comenzó el molesto pitido de
“comunicando”. 
Solté el auricular como si me quemara en las manos. 
Volví rápidamente al chat, al privado. Tecleé tan rápido que lo
escribí todo mal.

YO - ?ESta`s ahí´? 
YO - respondeeee!!!! 
YO - responde por favvor!!!! 
YO - ¿no me lees¿¿¿ 
YO - DI ALGOOOOOOOO

Histérico, cogí mi agenda y marqué su número de teléfono. Yo sí
tenía dos líneas y
podía permitirme permanecer en internet mientras le llamaba.
Conseguí comunicación
con el extranjero y esperé... esperé nervioso, mordiéndome el
labio, más agitado que
entero, más asustado que nunca... prácticamente bailaba en mi
asiento.

Pero no contestaba.

Colgué furioso pegándole tal golpe al auricular que pensé que me
habría cargado el
teléfono. Volví al privado y traté de que mi amiga respondiera. No
lo hacía. Al
final apareció un mensaje en mi privado. En su ventana.

ELLA - Ahora sí te veo. No tengas miedo. Sólo me quedaré un
momento.

Sentí un escalofrío que me recorrió la espina dorsal. El chat me
indicó que tras
escribir esa última frase, mi amiga había salido del chat. Ya no
estaba allí. No se
había despedido de nadie, ni de mí, ni del resto de los miembros del
chat. Se había
desconectado.

Miré fijamente la pantalla que sólo se movía ahora en el chat
general. Ni siquiera
sé de qué estaban hablando. Para mí todas las líneas no tenían
significado, sólo
podía mirar su último comentario del privado. “Ahora sí te veo.
No tengas miedo. 
Sólo me quedaré un momento”.

Entonces lo entendí. 
Comencé a llorar desesperado.

Mis manos corrieron a mis ojos y lloré sofocado, entendiendo que mi
amiga había
muerto, que era yo el que había tenido el presentimiento y la
premonición, y que
ahora ella estaba a mi lado. Esta extraña comprensión me hizo
girarme y mirar mi
habitación vacía. No quería creer que no estuviera allí. No
podía, no después de
todo....

Una caricia, tan suave que apenas era como un suspiro, acarició mi
cabeza.
Transmitió tal cantidad de paz que lejos de asustarme me relajó. Mis
lágrimas
continuaron cayendo por las mejillas. Ya no las secaba. Miraba al
vacío sabiendo que
ella estaba frente a mí.

- ¿Qué te han hecho? . –Pregunté al aire. 
- Pssss. 
Respiré hondo al escuchar ese sonido. Era como cuando era pequeño,
tenía miedo y mi
madre ponía su dedo en la boca y soplaba para que olvidara el tema y
pensara en
cosas buenas.

Ladeé triste la cabeza. La paz de su caricia no me abandonaba pero
sabía que éste
sería nuestro primer y último encuentro sin el ordenador de por
medio. Me tembló el
labio.

- Te echaré de menos.

En ese momento en el ordenador hubo un movimiento general. Se
minimizó el chat, se
abrió solo un tratamiento de textos, y apareció una corta frase en
una página en
blanco:

Y YO A TI.

puntos 21 | votos: 21
Pastillas para ser feliz. - Últimamente inventan de todo.
puntos 16 | votos: 16
Im Idiot - Por no haberle expresado mis sentimientos, he perdido mi oportunidad,
y ahora, está con otra...
Feel like a idiot..
puntos -6 | votos: 10
Mesas - en 3D
puntos 26 | votos: 26
Por esas personas  - que hacen que te rías hasta que no puedes más
puntos 12 | votos: 12
Tú me caes bien - a ti te mataré el último

puntos 13 | votos: 13
¿Te gusta que toque la guitarra? - pues a mi me gusta tocarla, me identifico con ella, y, si no te gusta, te jodes
puntos 9 | votos: 9
Por muy pequeñas  - que sean las cosas
no quiere decir que no sean importantes
puntos 35 | votos: 35
Ahora - lo único que quieres es volver a ser pequeño
puntos 21 | votos: 21
Típico - hechas na foto y el único que mira es el perro
puntos 20 | votos: 28
El escondite. - (es largo, pero merece la pena leerlo)

Una vez se reunieron todos los sentimientos y cualidades de los
hombres.

EL ABURRIMIENTO bostezaba, como siempre, cuando LA LOCURA les
propuso:

- ¡Vamos a jugar al escondite!

LA INTRIGA levantó la ceja, intrigada, mientras LA CURIOSIDAD, sin
poder contenerse,

preguntaba: ¿Al escondite? ¿Y cómo es eso?

- Es un juego -explicó LA LOCURA-, Yo me tapo la cara y comienzo a
contar, desde uno hasta un millón. Ustedes se esconden, y cuando yo
haya terminado de contar, el primero de ustedes que encuentre
ocupará mi lugar para continuar el juego.

EL ENTUSIASMO bailó, secundado por LA EUFORIA.

LA ALEGRÍA dio tantos saltos que terminó por convencer a LA DUDA, e
incluso a LA APATÍA, a quien nunca le interesaba nada.

Pero no todos quisieron participar.

LA VERDAD prefirió no esconderse. ¿Para qué?, si al final siempre
la hallaban.

LA SOBERBIA opinó que era un juego muy tonto (en el fondo lo que le
molestaba era que la idea no hubiese sido suya).

LA COBARDÍA prefirió no arriesgarse.

- Uno, dos, tres... -comenzó a contar LA LOCURA- La primera en
esconderse fue LA PEREZA que, como siempre, se dejó caer tras la
primera piedra del camino.

LA FE subió al cielo. LA ENVIDIA se escondió tras la sombra DEL
TRIUNFO, que con su propio esfuerzo había logrado subir a la copa
del árbol más alto.

LA GENEROSIDAD casi no alcanzaba a esconderse; cada sitio que hallaba
le parecía maravilloso para alguno de sus amigos.

¿Que si un lago cristalino? Ideal para LA BELLEZA, pensaba.

¿Que si la hendija de un árbol? Perfecto para LA TIMIDEZ.

¿Que si el vuelo de la mariposa? Lo mejor para LA VOLUPTUOSIDAD.

¿Que si una ráfaga de viento? Magnífico para LA LIBERTAD.

Así terminó por ocultarse en un rayito de sol.

EL EGOÍSMO, en cambio, encontró un sitio muy bueno desde el
principio, ventilado, cómodo... pero sólo para él.

LA MENTIRA se escondió en el fondo de los océanos (mentira, en
realidad se escondió detrás del arco iris).

LA PASIÓN y EL DESEO se fueron juntos al centro de los volcanes.

EL OLVIDO... se me olvidó donde se escondió... pero eso no es lo
importante.

Cuando LA LOCURA contaba 999.999,

EL AMOR aún no había encontrado sitio para esconderse, pues todo se
encontraba ocupado... hasta que divisó un rosal.

Enternecido, decidió esconderse entre sus rosas.

- ¡Un millón! - gritó LA LOCURA- y comenzó a buscar.

La primera en aparecer fue LA PEREZA, a solo tres pasos de la piedra
más cercana.

Después escuchó a LA FE, en el cielo, discutiendo con Dios sobre
teología.

A LA PASIÓN y EL DESEO los sintió en el vibrar de los volcanes.

En un descuido encontró a LA ENVIDIA, y así pudo deducir dónde
estaba EL TRIUNFO.

AL EGOÍSMO no tuvo ni que buscarlo, el solito salió disparado de su
escondite, que había resultado ser un nido de avispas.

De tanto caminar, LA LOCURA sintió sed; al acercarse al lago
descubrió a LA BELLEZA.

Con LA DUDA resultó más fácil todavía: la encontró sentada sobre
una cerca, sin decidir aún de que lado esconderse.

Así fue encontrando a todos, AL TALENTO entre la hierba fresca; a LA
ANGUSTIA en una oscura cueva; a LA MENTIRA detrás del arco iris
(mentira, estaba en el fondo del océano) y hasta EL OLVIDO... que ya
se le había olvidado que estaba jugando al escondite.

Pero EL AMOR no aparecía por ningún sitio.

LA LOCURA buscó desesperada, detrás de cada árbol bajo, en el
fondo de las lagunas, debajo de las piedras, en la cima de las
montañas. Se volvió loca buscando.

Cuando estaba por darse por vencida, divisó un rosal.

Sonriendo, tomó una horquilla y comenzó a mover las ramas.

De pronto se escuchó un doloroso grito.

¡Las espinas habían herido en los ojos AL AMOR!

LA LOCURA no sabía que hacer para disculparse.

Lloró, rogó, imploró, pidió perdón, y hasta prometió ser su
lazarillo. 
Desde entonces, desde que por primera vez se jugó al escondite, EL
AMOR es ciego, y.... LA LOCURA siempre lo acompaña

puntos 8 | votos: 12
¿¡Qué!? - ¡¡pero bueno!! ¿a quien elijo? uff... Una de las decisiones más dificiles de mi vida... 
¡¡ya se lo que aré!!
¡Me paso a otro test!
puntos 8 | votos: 12
Mi mejor amiga, mi mitad, - mi otro yo, mi sonrisa, la hermana que olvidaron darme
puntos 16 | votos: 18
Me has ayudado - ha llegar hasta aqui, y me dejas aqui, como si fuera la última parada
del viaje, no me habría imaginado esto, pero, así es la vida, y no
voy a pararme por ti, la vida sigue y sigue, y tú no vas a conseguir
que me detenga.
puntos 17 | votos: 17
Desmotiva - que a los perros, les traten como muñecos, con sus vestiditos y todo
eso, ¿acaso le has preguntado que si quiere ponerse eso?
puntos 24 | votos: 26
.¡Mira mira! - ¡Pero si es Gary! el caracol de Bob Esponja! 
-¡Ostias! es verdad, voy a pedirle un autógrafo, soy su mayor fan

puntos 19 | votos: 19
Quita el pause II - dale al play ►I
y vive la vida, que son 2 days
puntos 17 | votos: 19
 A veces  - tienes esa sensación incómoda, de que te va a pasar algo malo.. y no
lo sabes, hasta que sucede ..
puntos 21 | votos: 21
Antiguamente - los ricos se casaban por dinero, y decían que el amor era de pobres.. 
Pero en realidad, los ricos eran los pobres, porque no tenían amor..
puntos 10 | votos: 12
Jode - Querer demasiado a una persona.. y que luego te deje tirado cuando
llegan los problemas... Jode
puntos 8 | votos: 8
Ahora que soy libre - hago lo que me da la gana, no quiero ser mas tu Marioneta deja de
utilizarme, porque duele subnormal

puntos 18 | votos: 18
Pequeñas cosas en la vida... - Que pueden ser muuy importantes para ti L. (:
puntos 16 | votos: 18
Sigue Nadando, Sigue Nadando, - Sigue Nadando, Nadando, Nadando.. Que se hace? Nadar (:
puntos 16 | votos: 16
No te digo algo bonito.. - Te digo algo sincero, mi cariño es infinito, y mi amor es verdadero :)



LOS MEJORES CARTELES DE

Número de visitas: 11396854592 | Usuarios registrados: 2056541 | Clasificación de usuarios
Carteles en la página: 7999788, hoy: 14, ayer: 36
blog.desmotivaciones.es
Contacto | Reglas
▲▲▲

Valid HTML 5 Valid CSS!