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07.03.2013

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Geek

puntos 7 | votos: 7
La delgada línea - entre ser un valiente y un inconsciente.
puntos 7 | votos: 7
No hables así. - No eres así. Eres mejor que eso. Quiero darte algo puro, y honesto. He visto a esos cabrones mintiéndote. No saben lo especial que eres. No valen ni para lamer la mierda de mis botas. ¿Yo? Yo encontraría al perro que te hizo esta mierda y retorcería su peludo cuello. Jamás te mentiría.
puntos 9 | votos: 9
A veces, uno discute. - En algunos casos, se da cuenta durante la discusión de que hay algo mal consigo mismo. Y, en raras ocasiones, decide cambiarlo.
puntos 6 | votos: 6
Cada paso es un infierno. - No sé qué pisarán mis pies, no sé qué tocarán mis manos, no sé siquiera qué dejo tras de mí. Sé que llevo un largo rato caminando y que aún no encuentro una pared, y eso me aterroriza. Empiezo a pensar que estoy en un agujero negro con oxígeno, en un lugar infinito de oscuridad, temor, sufrimiento y dudas. Puede que esto sea un castigo divino, pero no creo que me haya portado tan mal, y tampoco creo que un demonio se haya fijado en mí para torturarme. Trago saliva, intentando aliviar la sed de mi garganta, y doy un paso más. Algo se choca contra mi cara, asustándome. Alzo las manos y agarro el objeto, palpándolo. Mis ojos se abren de sorpresa al darme cuenta que es una manualidad que hice con tres años para el Día de la Madre. Una manualidad que un niño de mi clase rompió consiguiendo que me sintiera realmente mal. Lo peor es que yo no hice nada para evitarlo. Mi ceño se frunce y mis brazos caen de golpe a ambos lados de mi cuerpo. Recordar eso me llena de una rabia incontenible que provoca que mis puños se cierren y mis uñas se claven con fuerza en mis palmas. No sé a qué viene este intenso enfado, pero acabo por gruñir de ira y apretar los dientes en medio de una oscuridad que podría ser mi propia ira. (Capítulo 4)
puntos 7 | votos: 7
Aún guardo este dibujo de Paint. - Lo hiciste, según sus propiedades, en 2007, hace ya, nada más y nada menos, que seis años, cuando las dos teníamos apenas once. No lo terminaste porque te tenías que ir a casa, porque tu madre vino a recogerte, por pereza, o por a saber qué circunstancias. Pero lo guardé, porque querías terminarlo. Recuerdo envidiar la facilidad con la que dibujabas, la facilidad con la que conseguías aprobar todo, la facilidad que tenías para hacer bien cualquier cosa. Recuerdo querer superarte. Recuerdo pensar que jamás lo conseguiría porque siempre estarías un paso por delante. ¿Dónde ha quedado esa envidia que me impulsó a mejorar? ¿Dónde están tus avances? ¿Por qué ahora, que he conseguido aquél objetivo, me siento mal porque no te tengo a mi lado, superándome, haciendo que quiera competir contigo? Son cosas que me pregunto, al igual que me pregunto si, después de tantos cambios que tú misma decidiste hacer en tu persona y que a tan mal camino te han llevado, te arrepientes. Me pregunto si te acuerdas de mí, si querrías estar a mi lado como yo quiero estar al tuyo. Me pregunto si tras esos ojos pintados, esas cejas tan depiladas, esas penas ahogadas en excesos, sigue estando aquella niña que tenía el mundo en sus manos. Me pregunto si algún día verás esto y completarás, por fin, el dibujo que tanto por ti está esperando.

puntos 2 | votos: 6
Ejercicios de cuello - en Desmotivaciones.es
puntos 3 | votos: 5
Perfectísimo, vamos. -
puntos 16 | votos: 16
Mas no imaginaste - la batalla que se te venía encima. Una batalla contra mí. Una batalla por mi felicidad. Una batalla que he ganado y que nunca, jamás, se repetirá. O al menos, no contra ti.
puntos 7 | votos: 7
Me consumiste. - Me oprimiste. Me hostigaste. Me hiciste -sangrar. Me gritaste. Me arrancaste -la piel. Me golpeaste. Me tiraste. Pero al mismo tiempo me besaste. Me acariciaste. Me sanaste. Me inspiraste. Me creciste. Me abrazaste. Me mimaste.
puntos 3 | votos: 3
Lloro. - ¿Cómo he podido llegar a degradarme tanto? He matado un animal con mis propias manos, y lo he comido sin cocinarlo antes, y no he pensado ni un segundo en los modales que tanto me inculcaron desde la infancia. Las lágrimas se deslizan por mi rostro y no me molesto en limpiarlas. Me levanto y camino por primera vez sin miedo entre la envolvente oscuridad. Parece no importarme nada. Simplemente camino, casi con ganas de morir. No encuentro sentido a lo que me ocurre. No encuentro sentido a toda esta oscuridad, a todo este vacío. No entiendo por qué a mí. Entonces, perdiéndome en el sinsentido, tropiezo con algo. Me giro hacia el objeto y comienzo a palparlo con cautela. Parece un sillón. Reviso que no haya nada en él y me siento. Al menos ahora tendré un lugar más cómodo en el que dormir. Decido que es momento de explorar entre las tinieblas, y comienzo a aunar fuerzas para hacerlo dentro de un rato. (Capítulo 3)

puntos 15 | votos: 15
A mí me lo vas a contar. -
puntos 7 | votos: 7
¡Cuidado! - ¡Un agujero en Desmo!
puntos 3 | votos: 3
Sigue arrastrándose, - y se acerca a mí. Pronto siento algo viscoso pasar por encima de mi pie. Un desagradable escalofrío me recorre y me aparto sin pensar. En mi mano izquierda se clava una astilla. Levanto la mano y entonces lo viscoso vuelve y se enrolla por mi pierna. Grito y oír mi voz me resulta extraño. Busco con las manos algo, cualquier cosa, que me sirva para matarlo. Mi corazón se acelera cuando lo viscoso llega a mi muslo, y las lágrimas acuden a mis ojos cuando mis dedos chocan contra un pequeño objeto metálico. Lo agarro desesperadamente y lo clavo una y otra vez en lo que ascendía, que se retuerce hasta caer, muerto, contra el suelo. Tras unos segundos lo toco, y descubro que es una serpiente. Mi estómago ruge y me relamo los labios. Quiero comer. Quiero comerla. Y lo hago, sin temor, sin quitarle la piel. Hundo los dientes en la carne y me sacio, guiándome por el instinto de supervivencia. (Capítulo 2)
puntos 4 | votos: 6
No importa - si abro los ojos o los cierro. No importa si duermo o despierto. No importa si me atrevo a caminar o si me quedo inmóvil. La oscuridad y su nada están conmigo todo el tiempo. Llevo aquí desde ayer, o quizá más. No he bebido ni comido nada desde que desperté aquí, y mi cuerpo empieza a pedirme nutrientes. Estiro los brazos, buscando algo, y mis dedos tiemblan en el aire ante el temor de que algo los hiera. Consigo dar un paso con los pies descalzos, y luego otro. Recorro, quizá, un par de metros. Pero no encuentro nada. Me rindo ante el miedo y me siento, como antes, para aunar fuerzas. A ver si dentro de un rato avanzo otro poco. De pronto, creo oír algo que se arrastra, y me pregunto si lo habré oído de verdad o si será, como antes, algo que mi propia mente ha creado. (Capítulo uno)
puntos 6 | votos: 6
Esto es un anuncio: - Voy a empezar a escribir una historia dentro de Desmo a base de carteles no muy extensos. Se llamará Dentro de la oscuridad y en las etiquetas aparecerá el nombre como dentrodelaoscuridad, todo juntito. Aviso por si alguien se anima a seguirla. Si no, pues nada, la escribiré para mí y Santas Pascuas.

puntos 2 | votos: 2
Prefiero - una piel endurecida a base de golpes y experiencia que una armadura que sólo consiga que por dentro sea de gelatina.
puntos 6 | votos: 8
¡COMBO! -
puntos 9 | votos: 9
¿Que no hacen llorar? - ¡JA! Pues cuando son partidas bien que salta el líquido a los ojos.
puntos 3 | votos: 3
Tú decides - si pasar la vida lamentándote de lo malo que te ha ocurrido o aprender de ello para poder aplicar sus enseñanzas; pero de esta decisión dependerá la actitud ante tu futuro, y la actitud que tomes ante las cosas puede hacerte muy desgraciado o muy feliz.
puntos 14 | votos: 14
El pan nuestro de cada día. -

puntos 5 | votos: 5
Cuando llegue la tormenta - podrás ser como un roble, fuerte e inmóvil, para acabar con tu tronco y ramas rotas; o como junco, fino y suave, para terminar entero tras haber sido agitado por los peores vientos.
puntos 10 | votos: 10
La depresión - me ha enseñado que una manera para ser feliz es apreciar las cosas buenas de la vida, y si algo bueno tiene la depresión es que de ella he podido aprender y sacar muchas cosas buenas.
puntos 5 | votos: 5
Hay miradas que matan - pero, ¿la tuya? La tuya, cariño, me llena de vida.
puntos 107 | votos: 127
- Leti, cariño, - ¿entonces nosotros qué somos?
puntos 12 | votos: 12
Al parecer - las personas de buen ver no pueden ser buenas personas.

puntos 4 | votos: 6
¿Pero qué tendrá que ver - el tocino con la velocidad?
puntos 4 | votos: 4
Depresiones - ¡La mejor inspiración para acabar en el psicólogo!
puntos 25 | votos: 27
Para aprender a dibujar - sólo hace falta ir a clase o, en su defecto, intentar estudiar.
puntos 6 | votos: 6
Todos tenemos demonios - que debemos combatir y domar para aprender algo bueno de ellos.
puntos 7 | votos: 9
O quizá le dejaría - porque sabe que, siendo Bella, merece algo más que una Bestia.

puntos 3 | votos: 3
Ni lo sabremos - ni lo comprenderemos, porque en verano lo olvidaremos.
puntos 3 | votos: 3
Esto es Arte - y no cuatro manchas sobre un lienzo.
puntos 5 | votos: 5
Lo tendré en cuenta -
puntos 4 | votos: 4
¿Qué quieres de mí? - ¿Que te arrastre por mares que jamás visitarás? ¿Que te lleve a los cielos, o dé respuesta a cien preguntas sobre el más allá? Pero, ¿qué es lo que esperas de mí? ¿Encontrar el tiempo perdido? ¿Un quiero saber pero no he sabido, o escribir los versos más tristes y romper a llorar? Contesta: ¿qué encuentras en mí, infiel lector? Tú, que me abandonas a cada momento. Yo sin mi historia, tú con tu sueño; absorto en el placer de esta aventura imposible que siempre, y digo siempre, vuelve a empezar.
puntos 3 | votos: 3
[Inserte aquí frase a completar - en la siguiente línea que incluya las palabras sociedad, vida, música y/o amor para que den lugar a la oración completa un sentido cercano al filosófico] [Espere a llegar a La Principal]

puntos 6 | votos: 6
¿Me lo dices - o me lo cuentas?
puntos 8 | votos: 8
Las leyendas del estudiante - Segunda trilogía de la épica saga que todos hemos vivido en algún momento.
puntos 4 | votos: 4
Para algunos - sigue siéndolo.
puntos 7 | votos: 7
Las leyendas del estudiante - Tercera parte: La entrega de notas.
puntos 4 | votos: 4
Las leyendas del estudiante - Segunda parte: El suspenso.

puntos 10 | votos: 10
Las leyendas del estudiante - Primera parte: El aprobado.
puntos 2 | votos: 2
Echáis la culpa a la sociedad. - La culpa de vuestros males, la culpa de vuestras faltas, la culpa de vuestras carencias, la culpa de todo lo que os ocurre; pero se os olvida que sois parte de ella.
puntos 0 | votos: 0
Podemos elegir, - es lo que tiene el libre albedrío, pero antes de ello debemos pensar en las consecuencias de nuestros actos, ya que todo podría salir bien o tener justo el resultado contrario.
puntos 6 | votos: 8
¿En qué quedamos? -
puntos 1 | votos: 1
¿Ves aquello? - Entre ruinas, en el horizonte, rompiendo con los colores, rompiendo con la miseria, con el miedo, con sus limitaciones. Aquello es una persona que sale, por fin, de un lugar donde ella misma había entrado tras haberse esforzado para salir por sus propios medios. Aquello es, ni más ni menos, que un héroe.

puntos 9 | votos: 11
Tras una apariencia hostil - puede haber personas que son todo corazón.
puntos 5 | votos: 5
Ducha caliente: - Una ducha normal pero conmigo en ella.
puntos 19 | votos: 19
Magníficas - casualidades cotidianas.
puntos 12 | votos: 12
Te refieres entonces - a todas las mañanas, ¿no?
puntos 10 | votos: 10
O de que no tenían - idea alguna sobre estilo.


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