Las amigas de mi abuela siempre me dicen que si
soy alto, guapo y
fuerte... y luego las zorreo un poco y resulta que ninguna
quiere
rollo, ¡menudas calientapollas!

Pensar que eres el mejor amigo para alguien, y un
día darte cuenta de
que a todos les importas poco, muy poco. Pero luego en esos
momentos
de bajón pensar a quién le importas, y
realmente darte cuenta de que
no es con quién más te ries tu mejor amigos
sino con el que nada
lloras.